Francisco Silva, futbolista paraguayo, charló con los colegas de Radio SuperK 800, donde manifestó que es jugador libre y que ya no pertenece a Delfín Sporting Club. Sin embargo, el cuadro mantense, insiste en que Silva tiene todavía contrato firmado.
Hay que resaltar que el martes pasado, el jugador de 27 años, acudió hasta la Asociación de Futbolistas del Ecuador junto a su empresario, Eduardo Díaz para buscar alternativas de finiquito con los 'Cetáceos'. En la AFE,lo atendió Jorge Guzmán, gerente de este organismo, quien se refirió al tema "Lo que está haciendo Delfín es negarle el derecho de trabajo al futbolista, ya que él no tiene ningún contrato con ese club y sin embargo, se aduce que sí existe".
Sobre este tema, Silva aclaró al medio de comunicación guayaquileño "Muy contento porque me dieron una noticia muy buena, de que soy jugador libre. Ahora ya depende de mi empresario, para ver en que equipo voy a jugar. En la agremiación me dieron todos los papeles, donde está mi representante, quien después me llamó a decir que ya todo está listo".
Con relación a su futuro profesional, indicó "Tengo posibilidades para regresar a Paraguay, de ir al fútbol europeo y también de jugar acá. Bueno eso ya depende de mi empresario y para eso está trabajando. Hay que esperar hasta el viernes para ver en que equipo juego".
Cuando le preguntaron, por qué se considera jugardor libre, el 'guaraní', respondió "La Federación me notificó que soy jugador libre mediante una carta. El documento de finiquito está en el Ministerio del Trabajo. Ese papel está firmado por el presidente del club (Delfín). Ellos mismos hicieron el documento. Yo quería salir bien del club, porque desde 2014 estaba ahí, pero lastimosamente me dieron la espalda".
Continuó "Hablaron muchas cosas, algunos compañeros me hicieron quedar mal frente a la provincia y el país, pero bueno no quiero y no voy a hablar de eso, porque no me gusta hablar mal de los compañeros".
Silva detalló por qué el entrenador de Delfín, Guillermo Sanguinetti lo sancionó para no jugar la final de vuelta ante Emelec "Yo no me arrepiento de nada de lo que hice. La verdad que después del partido (en el Capwell), mi novia me llamó y me dijo que estaba hospedada en el hotel y que bajara a su habitación un ratito, porque tenía un regalito que darme. Eran unos pupos, nada más".
A la vez, acotó que "En la mañana me fui a entrenar muy tranquilo. Pero, no se por qué se pusieron en mi contra. Después salieron con que me había vendido a un equipo. Como voy a hacer eso, si quería salir campeón con el club. Lastimosamente no pude salir campeón, pero ahora tengo que ver mi futuro y pensar en que equipo voy a jugar", finalizó.