La campaña de Croacia en la Copa del Mundo tuvo un comienzo flojo el miércoles con un empate 0-0 contra Marruecos, en un partido en el que el subcampeón de 2018 no logró desplegar su juego acostumbrado.
Las opciones de gol fueron escasas en el partido del Grupo F jugado en el estadio Al Bayt. El del miércoles fue el tercer empate sin goles en nueve encuentros disputados por el Mundial.
Los dos equipos tuvieron opciones de gol, siendo las más claras una de Nikola Vlasic para Croacia al final del primer tiempo y un cabezazo de Noussair Mazraoui para su rival.
Si bien el encuentro tuvo poca acción en las áreas, al menos tuvo mucha intensidad, ya que ambos equipos lucharon por la supremacía en el centro del campo.
El seleccionador croata, Zlatko Dalic, no se mostró nada abatido por la actuación de su equipo, y su única crítica fue que les faltó valentía para atacar más.
"Fuimos muy cautelosos para no cometer un error y estuvimos un poco indecisos", sostuvo. "Podría decir que nos faltó un poco de valentía (...) hoy Croacia ha tenido el control y la posesión, pero no generó suficientes oportunidades".
Los mejores momentos de Croacia pasaron, como era de esperar, por los pies de Luka Modric.
El capitán se movió con clase y soltura por el centro del campo. Por momentos se paraba delante de la zaga y luego se acoplaba con Andrej Kramaric en la delantera.
El seleccionador marroquí, Walid Regragui, se mostró encantado de que su equipo haya evitado que el croata hiciera demasiados estragos.
"Modric estuvo increíble, qué jugador", dijo antes de mostrar su satisfacción por el empate ante Croacia, a la que calificó como "uno de los mejores equipos de la competición".
Croacia centrará ahora su atención en su partido contra Canadá el domingo, cuando Marruecos se enfrente a Bélgica.
(Reporte de Toby Davis. Editado en español por Javier Leira) REUTERS