Clubes chilenos quieren siete extranjeros por equipo el 2008
Los clubes chilenos aprobaron
una propuesta liderada por el Colo Colo que aumenta a siete los
jugadores extranjeros por equipo en la primera y segunda división
desde la temporada 2008, en lugar del máximo de cuatro permitidos
actualmente.
El acuerdo se adoptó en un Consejo de Presidentes de Clubes, máxima instancia resolutiva del fútbol chileno, celebrado la noche de este miércoles, poco antes del partido Chile-Paraguay (0-3), que cerró la cuarta jornada de las eliminatorias sudamericanas del Mundial de Sudáfrica 2010.
La medida fue aprobada por 28 de los 32 clubes de primera y segunda y las abstenciones de Universidad Católica, Rangers y Curicó Unido, mientras el Deportes Concepción no participó en la reunión.
De concretarse la medida, en la temporada 2008 podría haber hasta 224 jugadores extranjeros en Chile, aunque la propuesta no especificó cuántos de los foráneos podrían estar en cancha en cada partido.
Los dirigentes, sin embargo, aprobaron que incluso, los clubes podrán tener hasta siete jugadores extranjeros en sus series juveniles.
El acuerdo, además, supone la liberación del tope de jugadores profesionales que puede tener cada equipo, que en la actualidad es de 25, lo que según fuentes periodísticas, preocupa a algunos dirigentes, por los mayores costos que supondrán los sueldos de las plantillas.
"Los grandes podrán contratar una cantidad ilimitada de jugadores y los chicos sólo lo justo. Esto favorece sólo a los que tienen más recursos", dijo al diario El Mercurio un dirigente que pidió reserva de su nombre.
"Estamos muy contentos, porque fue aprobado por la gran mayoría de los clubes. Esto va a permitir torneos mucho más competitivos", afirmó tras la reunión Gabriel Ruiz-Tagle, presidente del Colo Colo.
Para Harold Mayne-Nicholls, presidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP), el acuerdo "es una decisión del Consejo y si la mayoría optó por esa opción es lo que tenemos que acatar".
Para que la medida se concrete, sin embargo, debe modificarse un artículo del reglamento, para lo cual deberá celebrarse otro Consejo de presidentes.
Para la prensa deportiva, algunos técnicos, jugadores y dirigentes sindicales de los futbolistas, el acuerdo es una respuesta de los clubes al "Estatuto del Jugador", una ley recientemente aprobada que entre otros puntos, termina con los contratos prorrogables de forma automática.
Además, obliga a contratar a los jugadores surgidos de las canteras desde que cumplen 18 años, mientras actualmente esos futbolistas están amarrados a sus equipos hasta los 23 años, cuando recién pueden firmar un contrato profesional.
Entre los detractores surgió de inmediato el ex seleccionador chileno, ex subsecretario de Deportes y actual técnico de Universidad de Chile Arturo Salah, que consideró "lamentable" el aumento de extranjeros.
"Me parece muy lamentable y no ayuda en nada al fútbol chileno, le hace un daño y no ayudará en nada. Mi más absoluto rechazo a la medida que se adoptó", dijo Salah a radio Cooperativa.
"Es un tremendo error que al final va perjudicar a la profesión y al fútbol nacional. Manifiesto mi más profunda molestia por esa decisión, creo que ha sido poco pensada, mal fundamentada y equivocada", sentenció.
El acuerdo se adoptó en un Consejo de Presidentes de Clubes, máxima instancia resolutiva del fútbol chileno, celebrado la noche de este miércoles, poco antes del partido Chile-Paraguay (0-3), que cerró la cuarta jornada de las eliminatorias sudamericanas del Mundial de Sudáfrica 2010.
La medida fue aprobada por 28 de los 32 clubes de primera y segunda y las abstenciones de Universidad Católica, Rangers y Curicó Unido, mientras el Deportes Concepción no participó en la reunión.
De concretarse la medida, en la temporada 2008 podría haber hasta 224 jugadores extranjeros en Chile, aunque la propuesta no especificó cuántos de los foráneos podrían estar en cancha en cada partido.
Los dirigentes, sin embargo, aprobaron que incluso, los clubes podrán tener hasta siete jugadores extranjeros en sus series juveniles.
El acuerdo, además, supone la liberación del tope de jugadores profesionales que puede tener cada equipo, que en la actualidad es de 25, lo que según fuentes periodísticas, preocupa a algunos dirigentes, por los mayores costos que supondrán los sueldos de las plantillas.
"Los grandes podrán contratar una cantidad ilimitada de jugadores y los chicos sólo lo justo. Esto favorece sólo a los que tienen más recursos", dijo al diario El Mercurio un dirigente que pidió reserva de su nombre.
"Estamos muy contentos, porque fue aprobado por la gran mayoría de los clubes. Esto va a permitir torneos mucho más competitivos", afirmó tras la reunión Gabriel Ruiz-Tagle, presidente del Colo Colo.
Para Harold Mayne-Nicholls, presidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP), el acuerdo "es una decisión del Consejo y si la mayoría optó por esa opción es lo que tenemos que acatar".
Para que la medida se concrete, sin embargo, debe modificarse un artículo del reglamento, para lo cual deberá celebrarse otro Consejo de presidentes.
Para la prensa deportiva, algunos técnicos, jugadores y dirigentes sindicales de los futbolistas, el acuerdo es una respuesta de los clubes al "Estatuto del Jugador", una ley recientemente aprobada que entre otros puntos, termina con los contratos prorrogables de forma automática.
Además, obliga a contratar a los jugadores surgidos de las canteras desde que cumplen 18 años, mientras actualmente esos futbolistas están amarrados a sus equipos hasta los 23 años, cuando recién pueden firmar un contrato profesional.
Entre los detractores surgió de inmediato el ex seleccionador chileno, ex subsecretario de Deportes y actual técnico de Universidad de Chile Arturo Salah, que consideró "lamentable" el aumento de extranjeros.
"Me parece muy lamentable y no ayuda en nada al fútbol chileno, le hace un daño y no ayudará en nada. Mi más absoluto rechazo a la medida que se adoptó", dijo Salah a radio Cooperativa.
"Es un tremendo error que al final va perjudicar a la profesión y al fútbol nacional. Manifiesto mi más profunda molestia por esa decisión, creo que ha sido poco pensada, mal fundamentada y equivocada", sentenció.