Lanús y Boca Juniors prometen un final de Liga trepidante
El entrenador de Boca Juniors,
Miguel Russo, afirma que su equipo "depende de sí mismo" para lograr
el título de campeón del Apertura 2007, y el de Lanús, Ramón
Cabrero, que sus jugadores "ya tienen ganado el 40 por ciento" del
campeonato.
A falta de tres jornadas para que termine el torneo Lanús encabeza la clasificación con tres puntos de ventaja sobre Boca y ambos chocarán en "La Bombonera" en la penúltima, lo cual promete un trepidante final de curso.
El líder, ponderado unánimemente por su equilibrio, su alto rendimiento en partidos clave y el buen pie de la mayoría de sus futbolistas, llega entonado al tramo decisivo de la competición por los 16 puntos que ha sumado en las últimas seis jornadas.
Boca, desarticulado desde que Juan Román Riquelme regresó al Villarreal, se las arregló como pudo para mantener su condición de histórico candidato al campeonato y en los tres últimos capítulos del torneo se recuperó de una caída dolorosa ante su máximo rival, River Plate, con un empate y dos victorias resonantes.
Lanús nunca ganó un título de Liga y sus jugadores sueñan con un lugar en la historia. Boca, el más popular de Argentina, va a por la conquista número 31 en las competiciones locales desde su fundación en 1905.
El tercero en discordia es el modesto Tigre, que está a cinco puntos del liderato (quedan por disputarse nueve) como producto de una campaña sorprendente tras regresar a la categoría de honor después de 27 años de ausencia.
En las dos últimas jornadas quedaron fuera de carrera en la lucha por el título River Plate, Independiente, Banfield y Argentinos Juniors.
Si Boca Juniors termina la competición con victorias en los tres últimos partidos, lo que supondría un triunfo ante Lanús, y este equipo gana los otros dos, quedarán igualados en puntos, con lo cual tendrán que disputar un partido extra, como sucedió hace un año entre los boquenses y Estudiantes, cuando el equipo de Diego Simeone se proclamó campeón.
Lanús goleó el viernes a Rosario Central fuera de casa (1-4) y dos días después Boca vapuleó a Vélez Sarsfield (4-0), resultados que han fortalecido las aspiraciones de ambos candidatos.
"Lanús ha sido contundente porque llegó seis veces al área rival y marcó cuatro tantos. Es importante que a estas alturas el equipo resuelva de esta manera un partido bravo, con 35.000 aficionados en contra", dijo Cabrero.
El técnico del equipo granate destacó "la mentalidad ganadora" de sus futbolistas y la ventaja que otorga el hecho de que "jueguen bien" cuando el partido así lo requiere.
Boca estaba obligado a ganar el domingo y lo consiguió con amplitud. "Boca juega siempre bajo presión y por eso valoro este triunfo, que es para disfrutarlo, ya que este grupo de futbolistas tiene bien claro lo que es lograrlo en momentos difíciles", indicó Russo en los vestuarios.
"Es muy difícil sacarse la presión de ganar y lo conseguimos. Marcamos siete goles en dos partidos (tres ante Racing en la jornada anterior). Después del triunfo de Lanús en Rosario, el viernes, teníamos la obligación de ganar y cumplimos", añadió.
En Tigre se dedican a celebrar su exitoso presente, que excede todos los pronósticos, sin perder de vista un poco probable derrumbe de los favoritos.
"Lo que nos queda es ganar todo lo que sea posible. Si se caen los que están arriba en la clasificación, mejor, pero nuestro objetivo es sumar para asegurarnos la permanencia en la categoría", dijo el entrenador Diego Cagna, que debutó esta temporada como entrenador de un equipo de la Primera División.
Una delicada situación afrontan los históricos equipos rosarinos Newell's Old Boys y Rosario Central, con serios riesgos de descender de categoría.
El colista Rosario Central perdió ante Lanús y Newell's cayó derrotado en Bahía Blanca ante Olimpo (1-0). De momento, los equipos que descenderían son San Martín y Newell's mientras que Rosario y Olimpo jugarían la Promoción con equipos de la segunda división.
A falta de tres jornadas para que termine el torneo Lanús encabeza la clasificación con tres puntos de ventaja sobre Boca y ambos chocarán en "La Bombonera" en la penúltima, lo cual promete un trepidante final de curso.
El líder, ponderado unánimemente por su equilibrio, su alto rendimiento en partidos clave y el buen pie de la mayoría de sus futbolistas, llega entonado al tramo decisivo de la competición por los 16 puntos que ha sumado en las últimas seis jornadas.
Boca, desarticulado desde que Juan Román Riquelme regresó al Villarreal, se las arregló como pudo para mantener su condición de histórico candidato al campeonato y en los tres últimos capítulos del torneo se recuperó de una caída dolorosa ante su máximo rival, River Plate, con un empate y dos victorias resonantes.
Lanús nunca ganó un título de Liga y sus jugadores sueñan con un lugar en la historia. Boca, el más popular de Argentina, va a por la conquista número 31 en las competiciones locales desde su fundación en 1905.
El tercero en discordia es el modesto Tigre, que está a cinco puntos del liderato (quedan por disputarse nueve) como producto de una campaña sorprendente tras regresar a la categoría de honor después de 27 años de ausencia.
En las dos últimas jornadas quedaron fuera de carrera en la lucha por el título River Plate, Independiente, Banfield y Argentinos Juniors.
Si Boca Juniors termina la competición con victorias en los tres últimos partidos, lo que supondría un triunfo ante Lanús, y este equipo gana los otros dos, quedarán igualados en puntos, con lo cual tendrán que disputar un partido extra, como sucedió hace un año entre los boquenses y Estudiantes, cuando el equipo de Diego Simeone se proclamó campeón.
Lanús goleó el viernes a Rosario Central fuera de casa (1-4) y dos días después Boca vapuleó a Vélez Sarsfield (4-0), resultados que han fortalecido las aspiraciones de ambos candidatos.
"Lanús ha sido contundente porque llegó seis veces al área rival y marcó cuatro tantos. Es importante que a estas alturas el equipo resuelva de esta manera un partido bravo, con 35.000 aficionados en contra", dijo Cabrero.
El técnico del equipo granate destacó "la mentalidad ganadora" de sus futbolistas y la ventaja que otorga el hecho de que "jueguen bien" cuando el partido así lo requiere.
Boca estaba obligado a ganar el domingo y lo consiguió con amplitud. "Boca juega siempre bajo presión y por eso valoro este triunfo, que es para disfrutarlo, ya que este grupo de futbolistas tiene bien claro lo que es lograrlo en momentos difíciles", indicó Russo en los vestuarios.
"Es muy difícil sacarse la presión de ganar y lo conseguimos. Marcamos siete goles en dos partidos (tres ante Racing en la jornada anterior). Después del triunfo de Lanús en Rosario, el viernes, teníamos la obligación de ganar y cumplimos", añadió.
En Tigre se dedican a celebrar su exitoso presente, que excede todos los pronósticos, sin perder de vista un poco probable derrumbe de los favoritos.
"Lo que nos queda es ganar todo lo que sea posible. Si se caen los que están arriba en la clasificación, mejor, pero nuestro objetivo es sumar para asegurarnos la permanencia en la categoría", dijo el entrenador Diego Cagna, que debutó esta temporada como entrenador de un equipo de la Primera División.
Una delicada situación afrontan los históricos equipos rosarinos Newell's Old Boys y Rosario Central, con serios riesgos de descender de categoría.
El colista Rosario Central perdió ante Lanús y Newell's cayó derrotado en Bahía Blanca ante Olimpo (1-0). De momento, los equipos que descenderían son San Martín y Newell's mientras que Rosario y Olimpo jugarían la Promoción con equipos de la segunda división.