Directivo del fútbol colombiano en la picota por acusación de hijo de capo
El vicepresidente de la Federación
Colombiana de Fútbol (FCF), Álvaro González Alzate, quedó hoy en la
picota pública tras denuncias del hijo del extraditado capo del
narcotráfico Gilberto Rodríguez Orejuela de que el directivo formó
parte de una red que sobornó árbitros en los años 80 y 90.
González Alzate, quien fue vicepresidente de la Copa América de Colombia 2001 y ha sido representante en la Comisión Arbitral de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), señaló tras esa acusación que estudia la posibilidad de interponer una denuncia judicial.
Fernando Rodríguez Mondragón, hijo de Gilberto Rodríguez Orejuela, declaró al diario bogotano El Tiempo que González Alzate "era parte de una 'cuerda' que permitía sobornar y presionar árbitros en el campeonato de fútbol colombiano".
Según Rodríguez Mondragón, los árbitros sobornados favorecían especialmente al América de Cali y al Real Cartagena, equipos de propiedad de su padre y su tío, Miguel Rodríguez Orejuela, también extraditado y detenido en Estados Unidos bajo cargos de tráfico de cocaína.
González "era de la cuerda de mi tío. Yo tengo pruebas y me enteré cuando mis primos manejaban el América de Cali, que él era la persona que directamente les entregaba los nombres de los árbitros, con cuatro ó cinco días de anticipación a los partidos para que ellos hicieran lo que tenían que hacer", señaló.
Al explicar cómo funcionaba el esquema de sobornos, Rodríguez Mondragón señaló que el "trabajo" de González Alzate consistía en dar los nombres de los árbitros designados para los partidos que interesaban al América y que la cúpula del cártel de Cali se ocupaba de averiguar "dónde estaban, dónde trabajaban" para contactarlos.
"Mi tío no se iba a confiar y menos en las finales: en el fútbol nunca está nada escrito. Mi tío aseguraba los partidos con los árbitros que eran de su cuerda, sin que los jugadores supieran", señaló Rodríguez Mondragón, quien recientemente publicó un libro titulado "El hijo del ajedrecista".
Gilberto Rodríguez Orejuela era conocido en el mundo de la mafia colombiana como "El ajedrecista".
Rodríguez Mondragón aseguró que "a los (árbitros) que no querían recibir el dinero igual se les dejaba y así quisieran devolverlo no se lo recibían".
En su relato, Rodríguez Mondragón manifestó que "era fácil dañarle el corazón a un árbitro", a los que se les ofrecía el 2.333 por ciento más de lo que recibían por dirigir un partido, y citó a los ya retirados Fernando Panesso, Flavio Rojas, John Jairo Toro y Wílmer Barahona, todos colombianos.
El "hijo del Ajedrecista" aseguró a El Tiempo que la mafia no pudo corromper al árbitro Óscar Julián Ruiz, considerado el mejor de Colombia y acusado el miércoles pasado por el ex astro Carlos 'Pibe' Valderrama, de "ladrón".
América de Cali es el segundo equipo que más campeonatos ha ganado en Colombia con 12 en total, entre 1982 y 1997, y jugó las finales de la Copa Libertadores de América en 1985, 1986 y 1987, sin alcanzar el título.
En la plantilla de lujo que alternó en esas temporadas destacaban los argentinos Julio César Falcioni, Aurelio José Pascutini, Ricardo Gareca, los peruanos César Cueto y Guillermo Larrosa, los paraguayos Roberto Cabañas, Gerardo González Aquino y Juan Manuel Bataglia, así como el colombiano Willington Ortiz.
Tras conocer las acusaciones del hijo de Gilberto Rodríguez Orejuela, González Alzate, quien también es presidente de las División Aficionada del Fútbol Colombiano, manifestó que estudia la posibilidad de entablar acciones judiciales contra Rodríguez Mondragón.
A través de la oficina de prensa de la Federación, el directivo dijo, además, que no entrará en polémicas con el autor del libro "El hijo del ajedrecista".
González Alzate, quien fue vicepresidente de la Copa América de Colombia 2001 y ha sido representante en la Comisión Arbitral de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), señaló tras esa acusación que estudia la posibilidad de interponer una denuncia judicial.
Fernando Rodríguez Mondragón, hijo de Gilberto Rodríguez Orejuela, declaró al diario bogotano El Tiempo que González Alzate "era parte de una 'cuerda' que permitía sobornar y presionar árbitros en el campeonato de fútbol colombiano".
Según Rodríguez Mondragón, los árbitros sobornados favorecían especialmente al América de Cali y al Real Cartagena, equipos de propiedad de su padre y su tío, Miguel Rodríguez Orejuela, también extraditado y detenido en Estados Unidos bajo cargos de tráfico de cocaína.
González "era de la cuerda de mi tío. Yo tengo pruebas y me enteré cuando mis primos manejaban el América de Cali, que él era la persona que directamente les entregaba los nombres de los árbitros, con cuatro ó cinco días de anticipación a los partidos para que ellos hicieran lo que tenían que hacer", señaló.
Al explicar cómo funcionaba el esquema de sobornos, Rodríguez Mondragón señaló que el "trabajo" de González Alzate consistía en dar los nombres de los árbitros designados para los partidos que interesaban al América y que la cúpula del cártel de Cali se ocupaba de averiguar "dónde estaban, dónde trabajaban" para contactarlos.
"Mi tío no se iba a confiar y menos en las finales: en el fútbol nunca está nada escrito. Mi tío aseguraba los partidos con los árbitros que eran de su cuerda, sin que los jugadores supieran", señaló Rodríguez Mondragón, quien recientemente publicó un libro titulado "El hijo del ajedrecista".
Gilberto Rodríguez Orejuela era conocido en el mundo de la mafia colombiana como "El ajedrecista".
Rodríguez Mondragón aseguró que "a los (árbitros) que no querían recibir el dinero igual se les dejaba y así quisieran devolverlo no se lo recibían".
En su relato, Rodríguez Mondragón manifestó que "era fácil dañarle el corazón a un árbitro", a los que se les ofrecía el 2.333 por ciento más de lo que recibían por dirigir un partido, y citó a los ya retirados Fernando Panesso, Flavio Rojas, John Jairo Toro y Wílmer Barahona, todos colombianos.
El "hijo del Ajedrecista" aseguró a El Tiempo que la mafia no pudo corromper al árbitro Óscar Julián Ruiz, considerado el mejor de Colombia y acusado el miércoles pasado por el ex astro Carlos 'Pibe' Valderrama, de "ladrón".
América de Cali es el segundo equipo que más campeonatos ha ganado en Colombia con 12 en total, entre 1982 y 1997, y jugó las finales de la Copa Libertadores de América en 1985, 1986 y 1987, sin alcanzar el título.
En la plantilla de lujo que alternó en esas temporadas destacaban los argentinos Julio César Falcioni, Aurelio José Pascutini, Ricardo Gareca, los peruanos César Cueto y Guillermo Larrosa, los paraguayos Roberto Cabañas, Gerardo González Aquino y Juan Manuel Bataglia, así como el colombiano Willington Ortiz.
Tras conocer las acusaciones del hijo de Gilberto Rodríguez Orejuela, González Alzate, quien también es presidente de las División Aficionada del Fútbol Colombiano, manifestó que estudia la posibilidad de entablar acciones judiciales contra Rodríguez Mondragón.
A través de la oficina de prensa de la Federación, el directivo dijo, además, que no entrará en polémicas con el autor del libro "El hijo del ajedrecista".