La Copa América que se disputa desde hoy en Venezuela cuenta con un dispositivo de seguridad en el que participan 50.000 personas, indicó el viceministro de Seguridad Ciudadana, Tarek El-Aissami.

Ese contingente está formado por 45.000 miembros de todos los cuerpos de seguridad del Estado, policías locales y regionales, y tiene como misión garantizar la seguridad tanto en los estadios como en los hoteles y vías de comunicación que utilizaran los equipos.

A ellos se suman 5.000 voluntarios que complementaran la labor de los agentes, sobre todo en el área de la asistencia y la ayuda a los aficionados que acudan a los partidos.

El-Aissami explicó que en los estadios existirán cinco anillos de seguridad que, en teoría, impedirán que alguien pueda saltar al terreno de juego o que quiera utilizar los partidos como escenario para reivindicaciones de cualquier naturaleza.

"Son cinco niveles de seguridad, en forma de anillos de seguridad. Este despliegue comienza desde la parte más próxima del escenario donde se disputan los partidos y se extiende hasta las zonas próximas de los estadios", explicó El-Aissami.

El viceministro recordó que se mantiene la prohibición de vender y consumir bebidas alcohólicas en los estadios y en sus cercanías, así como la de portar armas de cualquier tipo.

El-Aissami manifestó que este operativo de seguridad fue desplegado el 15 de junio en todos los aeropuertos y hoteles que funcionan en las nueve ciudades sedes de la Copa.

Por otra parte, el jefe militar de la región de San Cristóbal, general Jaime Escalante, dijo que en la ceremonia de inauguración de la copa y en el partido que disputarán Bolivia y Venezuela participarán 6.500 personas en tareas de seguridad.

"Tenemos un plan bien coordinado con todos los cuerpos de seguridad del Estado que se encuentran acá para resguardar a los visitantes nacionales y extranjeros", dijo Escalante a la prensa