Nadal amplió su leyenda en Roma ante las dudas de Federer.

Enviado por carlosefrain el Lun, 14/05/2007 - 09:44
El español Rafael Nadal (n.2), con su triunfo este domingo por tercera vez consecutiva en el Masters Series de Roma, al batir en la final al chileno Fernando González (n.6), amplió su leyenda de jugador imbatible sobre la tierra batida, consiguiendo además récords inhumanos.

Nadal no sólo ganó en Roma, sino que además ha recortado en 275 puntos su distancia con el líder mundial, el suizo Roger Federer, en la lista de entradas ATP, y ha aumentado su liderato en la denominada Carrera de Campeones (lista del año), en la que ya saca a Federer 104 puntos.

Pero, sobre todo, se ha convertido en el único jugador en la historia en ganar tres veces consecutivas el Abierto de Italia, que ya había conquistado en 2005 y 2006. Hasta ahora nadie lo había logrado.

Y, por si fuera poco, Nadal ha quitado a la ilustre leyenda estadounidense John McEnroe el récord de triunfos seguidos sobre una misma superficie, que el norteamericano tenía con 75 partidos (septiembre 1983-abril 1985).

El mallorquín suma ya 77 partidos consecutivos ganados sobre la tierra batida; no pierde sobre esta superficie desde el 8 de abril de 2005, cuando lo hizo en el Torneo de Valencia ante el ruso Andreev.

McEnroe logró el suyo en sala. Nadal lo batió ante los propios ojos del estadounidense, que siguió en vivo sus partidos al estar en Roma disputando el torneo de veteranos.

La victoria de Nadal en Roma ha sido incuestionable. Tan sólo pasó apuros en las semifinales ante el ruso Nikolay Davydenko, con quien estuvo cerca de la derrota pero al final se llevó el triunfo por 7-6 (3), 6-7 (8) y 6-4, tras tres horas y treinta y ocho minutos. No es el partido más largo de la historia a tres sets, pues este se vivió en 1994 (3 horas y 54 minutos, en Tel Aviv).

Eso sí, ante Davydenko se dejó el único set del torneo y su primero sobre la tierra batida desde septiembre 2006, donde lo cedió en eliminatoria de Copa Davis ante el italiano Filippo Volandri en Santander.

Antes, pese a molestias estomacales y ligeros mareos en el primer partido ante el italiano Daniele Bracciali, que incluso le llevaron a pasar en la mañana del jueves por un hospital, arrasó al ruso Youzhny (octavos) y al serbio Djokovic (cuartos).

Dos partidos ante rivales muy difíciles y en los que Nadal rayó en la perfección, con acciones casi inhumanas y que levantó los elogios de propios y extraños; entre ellos, del propio McEnroe, que siguió el partido ante Djokovic, en el que el español igualaba su récord, desde la primera fila de la zona de los fotógrafos.

Nadal, tras sufrir ante Davydenko, se paseó en la final, la primera del torneo al mejor de tres sets. Derrotó a González por un doble 6-2. Alzó su tercer torneo seguido romano y siguió el camino de los últimos tres años, que le han visto ganador en Montecarlo, Barcelona, Roma y .... Roland Garros, al cita que falta este año.

Este Grand Slam tiene a Nadal como absoluto favorito tras lo visto en Roma, donde se vio la caída sorprendente en octavos de Federer, que había llegado antes que ninguno para prepararse, en sus deseos de vengarse de sus últimas derrotas ante Nadal, y especialmente de la sufrida en el mismo escenario el pasado año en cinco larguísimos sets, tras más de cinco horas de juego.

Federer naufragó ante el local Filippo Volandri, dejando numerosos interrogantes sobre su actual adaptación física y, especialmente, mental a la tierra batida en busca de un Roland Garros que no tiene en sus vitrinas. El suizo se fue tan preocupado que en los últimos días rompió con su entrenador, el legendario Tony Roche.

En tanto, Nadal aumentó su leyenda, logró su noveno título Masters Series -sólo ha perdido una final, ante Federer en Miami en 2005- y el vigésimo primer título de su carrera (16 sobre tierra batida, con 116 partidos ganados y sólo 12 perdidos).

Y sigue invicto en Roma, donde ya suma 17 partidos seguidos ganados de idéntico número jugado. Desde luego, Nadal se va de Roma más rey que nunca. EFE