El Congreso extraordinario del fútbol ecuatoriano, celebrado en Ibarra, puso de manifiesto algunos aspectos que considero oportuno puntualizarlos y resaltarlos.

La resolución de reducir la sanción de Agustín Delgado, fue crónica de una decisión anunciada. Y por supuesto que fue una resolución justa antes que sabia, ya que si en su debida oportunidad, quienes sancionaron al "Tin" se habrían tomado la molestia de ser más analíticos y coherentes, de juzgar en serio la hoja de vida y servicios del goleador del Chota, de repasar en forma detenida sus antecedentes, impecables por cierto, de haber evaluado todo lo que aporto con sus goles  y de las múltiples alegrías que le ha dado al país, estoy convencido que no habría hecho falta la realización de tal Congreso.

En todo caso, se hizo justicia, Delgado volverá a los terrenos de juego a partir del 19 de junio, una vez que haya cumplido el cincuenta por ciento de la sanción impuesta. La noticia fue recibida con beneplácito en todo el país
 
La reunión de los máximos dirigentes de nuestro fútbol, sirvió también para poner de manifiesto una vez más el Poder y el Liderazgo que ejerce el Presidente de la F.E.F. y la influencia que mantiene sobre la gran mayoría, por no decir la totalidad de los directivos nacionales. No solo fue un triunfo para el "Tin" Delgado, que logró que le redujeran la sanción, este congreso ratificó la capacidad,  habilidad, experiencia e inteligencia  de un directivo que conoce el ABC  de cómo se manejan estos temas y más aún cuando se ponen espinosos.

Horas antes del Congreso extraordinario, AFNA, Asociación de Fútbol no Amateur de Pichincha, una de las asociaciones más prestigiosas y de mayor peso en cuanto a su opinión, había resuelto, luego de un profundo análisis, particularmente de sus asesores jurídicos y con la participan de los delegados de todos sus clubes, declarar ilegal la convocatoria a dicho Congreso. La resolución también contemplaba asistir a la reunión, dejar claramente definida la posición y no participar del Congreso. Esta posición era a más de unánime y monolítica, firme y sin concesiones.

Cuando el Presidente del organismo rector de nuestro fútbol, arribó a la Ciudad de Ibarra, su rostro reflejaba contrariedad antes que preocupación, por primera vez en su largo y fructífero mandato, nadie puede negar los éxitos y logros alcanzados por él, debía enfrentar una oposición y nada más y nada menos de la Asociación que siempre lo respaldo e impulso, AFNA

En ese momento es donde se revela el directivo inteligente, astuto, florece toda la capacidad y experiencia acumulada en más de treinta años, Chiriboga hace uso de su Liderazgo y Poder,

Los conceptos que trae el Diccionario de la lengua española sobre poder y liderazgo determinan la capacidad y habilidad de hacer algo. Fuerza y vigor. Posesión de una cosa. Tener la facultad de hacer algo unipersonal.

Liderazgo, Dirigente jefe que va a la cabeza en una clasificación, así lo define mi pequeño Larousse.

Después de lo de Ibarra, hay alguien a quien le quede duda de quién ejerce y tiene el poder en la conducción del fútbol ecuatoriano  Pienso que a nadie. Chiriboga, más allá de unos pocos que cuestionan su gestión, ha demostrado ser quién lleva muy bien aseguradas las riendas en el balompié nacional, en cuestión de minutos logró que quienes se oponían, AFNA, lo respaldaran incondicionalmente, excepto el Club Espoli, que se ausentó del Congreso. La decisión de levantar la suspensión a Agustín Delgado fue unánime.
 
Al final, el histórico goleador de la tricolor, derramaba lágrimas en un abrazo interminable con su madre, por la felicidad de volver a los campos de juego. Chiriboga otro histórico de nuestro fútbol. Desde lo más alto sonreía complacido en su obra.