Dieciocho seguidores, de los cuales uno de ellos en estado grave que se encuentra ingresado en un hospital con una herida en el cuello, es el balance de los incidentes acontecidos entre ambas aficiones con motivo del Roma-Manchester United (2-1), partido de ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones.

Los incidentes más notorios, según ha informado la policía, tuvieron lugar antes del encuentro, cuando pese al gran dispositivo de seguridad se enfrentaron miembros de las dos aficiones en zonas cercanas al romano estadio "Olímpico".

Producto de ello se registraron dieciocho heridos, en su mayoría de carácter leve y que fueron atendidos en los puestos sanitarios instalados con motivo del partido.

El herido de mayor gravedad es de nacionalidad inglesa, que recibió un corte de arma blanca en el cuello y fue ingresado en el hospital "San Giacomo".

Durante el partido se produjeron algunos incidentes leves, al lanzar seguidores ingleses objetos contra la policía.

Al término del encuentro, en cambio, imperó la calma. Especialmente ante las medidas policiales de mantener durante unos minutos a los seguidores ingleses en las gradas, mientras se iban los aficionados italianos.

La espera de los seguidores ingleses en el estadio les fue amenizada al proyectar en uno de los videomarcadores las imágenes de la Copa de Europa ganada por el Manchester United ante el Bayern de Munich, en el estadio Camp Nou de Barcelona.

Después, fueron acompañados en autobuses por las fuerzas del orden hasta los dos aeropuertos de salida para su país.