El actual campeón de la Copa Libertadores
de América, el brasileño Internacional, se complicó su pase a los
octavos de final al ser incapaz de vencer en Porto Alegre al
argentino Vélez Sarsfield, con el que tan solo pudo empatar a cero
goles.
Los brasileños necesitaban urgentemente de una victoria para
mantener vivas sus esperanzas de clasificación, pero carecieron de
la necesaria inspiración para superar la defensa planteada por el
Vélez, que a su vez tampoco hizo méritos suficientes para obtener
una victoria que le hubiera puesto con pié y medio en octavos.
Ahora el Internacional no solo depende de sí mismo, sino también
de lo que haga el Nacional uruguayo, con el que iguala a puntos pero
con un partido menos, el que le enfrentará al colista del grupo, el
Emelec ecuatoriano.
Quien sí logró esta semana dar un gran paso para alcanzar los
octavos fue el uruguayo Defensor Sporting en el grupo 8. Su victoria
por 3-0 ante el colombiano Deportivo Pasto por 3-0, lo sitúa en una
buena posición para continuar en la competición pues tan solo
depende de sí mismo.
El Deportivo Pasto no fue rival para la ambición del Defensor,
que pronto puso los medios para hacerse con el control del partido y
con la victoria ante un rival con muchas carencias técnicas.
El Audax italiano dio un gran paso hacia su clasificación para
los octavos al imponerse al peruano Alianza de Lima, al que la
derrota dio la puntilla definitiva al dejarle ya sin opciones de
clasificación.
Los chilenos dominaron el primer tiempo de un partido disputado
en un campo muy pesado por la lluvia, periodo en el que logró el gol
que luego les daría la victoria. En el segundo el Alianza, acuciado
por la necesidad de una victoria, pasó a controlar las acciones,
pero se encontró con un muro insalvable, el portero local Nicolás
Peric, que lo detuvo todo.
En Porto Alegre el brasileño Gremio logró una importante victoria
ante el colombiano Deportes Tolima, con el que empató en la primera
plaza del grupo 3.
Los colombianos viajaron a Brasil con la intención de lograr una
victoria que les despegara casi definitivamente del resto de sus
rivales en la clasificación y que les pusiera muy cerca de los
octavos de final. Sin embargo, fue el Gremio el que llevó el peso
del partido y aunque tan solo pudo marcar un gol, finalmente
consiguió el ansiado triunfo y, con ello, mantener intactas sus
posibilidades de alcanzar la siguiente fase e, incluso, hacerlo como
primero de grupo.
En el grupo 7 el Cienciano de Perú colocó en una situación muy
apurada al boliviano Bolívar al imponerse a domicilio por 3-2,
resultado que coloca a estos en la última posición con muy escasas
opciones de clasificación.
Los peruanos realizaron un planteamiento de partido basado en la
velocidad de sus hombres y en una generosa entrega física que
asfixió a los locales pese a que el brasileño Leitao, con dos goles,
mantuvo a su equipo en el partido. Al final, el Cienciano aprovechó
sus opciones para igualar a puntos con el Toluca mexicano y situarse
a tan solo uno del Boca Juniors, líder.
En el grupo 6 la clasificación ha dado un vuelco con la victoria
del Colo Colo chileno ante el Caracas venezolano por 2-1, ya que los
primeros han pasado del cuarto puesto a ser líderes en lugar,
precisamente, de sus rivales de esta semana.
El triunfo chileno no estuvo exento de polémica, que se produjo
por un penalti señalado por árbitro peruano Manuel Garayen en el
tiempo de descuento, lo que desquició a los jugadores del Caracas,
que protestaron airadamente y que ya saboreaban el empate y
continuar en el liderato.
Los chilenos controlaron el juego en la primera mitad, buscando
con ganas la portería de su rival, mientras que en la segunda el
Caracas logró encontrar la forma de cambiar la situación y de
disponer sus opciones de gol, lo que se tradujo en el tanto del
empate por mediación de César González. Luego llegaría el polémico
penalti y el tanto de Humberto Suazo que llevó a su equipo a lo más
alto de la clasificación.
En el mismo grupo el argentino River Plate continúa inmerso en
una ya preocupante crisis goleadora, tanto en la Libertadores como
en su torneo doméstico, por lo que su técnico Daniel Passarella y
los jugadores comienzan a estar cada vez más contestados.
En esta ocasión el beneficiado de su falta de efectividad
goleadora fue la Liga Deportiva Universitaria de Quito, que arrancó
un valioso punto de su visita al Monumental de Buenos Aires al
empatar a cero.
Los argentinos lo intentaron de todas las formas, pero se
estrellaron una y otra vez en la muralla defensiva de los
ecuatorianos y, en última instancia, en su portero Cristian Mora, un
baluarte insalvable.