El meta Gianluigi Buffon, que en los dos últimos días se ha visto afectado por un problema gástrico, es la gran duda en una selección italiana nerviosa y que precisa del triunfo para no ver peligrar su clasificación ante una Escocia que llega mucho más tranquila y líder del grupo B.

Los cinco puntos de distancia a los que está Italia de Escocia y Francia, y a los dos que se encuentra de Ucrania, hacen que la victoria sea para el combinado transalpino el único resultado válido.

Pero la víspera del Italia-Escocia, que se jugará en el estadio "San Nicola" de Bari, no puede resultar más que preocupante para los italianos: su seleccionador, Roberto Donadoni, está en abierta polémica con los medios informativos y hay claro peligro de ver a la vigente campeona mundial ya casi fuera de la Eurocopa'08.

Donadoni explotó ante las críticas recibidas, ante quienes le acusan de poco carácter, de poca validez como técnico y contra quienes dicen que de no ganar a Escocia debería ser relevado.

Y es que, pese a haber ganado los dos últimos partidos (Ucrania y Georgia), la sombra de su predecesor, Marcello Lippi, es muy larga. Como también lo es la de su amigo Carlo Ancelotti, entrenador del Milán, y que se ha visto envuelto en la polémica por decir que "algún día (después de su amigo Donadoni)" le gustaría dirigir a la selección.

Pero la polémica y la disputa entre jugadores y técnicos con la prensa es ya habitual en las concentraciones de los "azzurri". La hubo, y muy gorda (silencio a la prensa), en España'82 y también, algo menos agria, en Alemania'06; en ambos casos les sirvió para ganar el título. Y es que Italia, como nadie, está en su salsa con las críticas.

A ello se añade la duda de Buffon, motivo por el cual Donadoni tuvo que convocar de forma urgente al meta De Santis. Se espera que Buffon, considerado el mejor portero del mundo y uno de los salvadores en Alemania'06, pueda jugar, pero, de no hacerlo, su puesto lo ocuparía el torinista Christian Abbiati.

Por fortuna para Donadoni, ya está recuperado el romanista Simone Perrotta; un jugador importante para el módulo 4-2-3-1, estilo Roma, ya que junto a imponer su fuerza en centro del campo sabe sumarse al ataque a sorpresa. El fiorentino Luca Toni, a falta de Francesco Totti, sería la única punta neta.

Otro punto de fricción entre Donadoni y la prensa italiana es la presunta suplencia del juventino Alessandro del Piero en beneficio de Antonio Di Natale. Las críticas, ante el buen momento goleador del primero, ya han llegado y serían imparables con un tropiezo ante Escocia.

Ante este complicado panorama italiano, la situación de Escocia es todo un bálsamo. Sus precedentes son muy negativos, pues ha perdido en las anteriores (cinco) visitas a Italia (la última incluso encajando un gol del entonces jugador Donadoni), pero ahora tiene la tranquilidad de saber que la derrota no complica mucho sus opciones de clasificación.

En cambio, el empate o el triunfo le certificarían como un serio candidato al pase; además de casi dejar ya en la cuneta a un directo e ilustre rival.

Eso sí, el técnico Alex McLeish presentará un esquema más cerrado del partido del sábado ante Georgia, con prácticamente cinco centrocampistas y una sola punta, que se antoja sea Miller.

Así, las variantes vendrían con las entradas de Brown de enlace entre el centro del campo y Miller, dejando su plaza Boyd, y en defensa de Pressley por McManus.

Escocia estará acompañada en Bari de unos cinco mil seguidores, que ya han empezado a llegar a la ciudad de la Apulia y que, por su colorido y ruido, se hacen notar y lo harán más en un estadio "San Nicola" que espera casi un lleno.

Alineaciones probables:

Italia: Buffon o Abbiati; Oddo, Cannavaro, Materazzi, Zambrotta; Gattuso, De Rossi; Camoranesi, Perrotta, Di Natale; Toni.

Escocia: Gordon; Alexander, Weir, Pressley, Naismith; Teale, Ferguson, Hartley, McCulloch; Brown; Miller.

Arbitro: Frank De Bleeckere (BEL).

Estadio: "San Nicola" de Bari (20.50 hora local; 18.50 gmt).