Colombia cierra su preparación con un entrenamiento a puerta cerrada
Colombia cerró hoy su preparación para el partido contra Argentina con un entrenamiento a puerta cerrada en el que el seleccionador Jorge Luis Pinto siguió probando alternativas para el duelo de mañana.
El equipo inicial, según aseguró al término de la práctica el segundo entrenador José "Cheché" Hernández, todavía no está decidido y Pinto sólo lo dará a conocer mañana poco antes del partido.
Sin embargo, por lo que alcanzó a verse del entrenamiento desde fuera, hay al menos un cambio que se perfila y que es la salida del volante Alvaro Domínguez, para darle cambio a Jorge Eliécer Banguero con la esperanza de que aporte mayor estabilidad en el centro del campo.
Una novedad es que el delantero Edixon Perea sufre una tendinitis y está siendo tratado por el cuerpo médico con la esperanza de que que pueda estar a disposición mañana.
No obstante, ya ayer Pinto había probado a otras alternativas para acompañar a Hugo Rodallega en la delantera y concretamente a los jugadores Andrés Chitiva y César Valoyes.
En la mañana el equipo había estado paseando en un parque y luego había ido a un centro comercial como medida para bajar la tensión y lograr mayor tranquilidad de cara al compromiso de mañana.
El centrocampista Fabian Vargas, al final del entrenamiento, dijo que lo más importante para Colombia es mantener protegido su portería para conseguir al menos un punto o tres, y seguir con vida en esta Copa América.
"Hay que trabajar con disciplina y mantener resguardado nuestro arco para conseguir al menos un punto o dos y así seguir con vida en esta Copa América", dijo Vargas.
Vargas admitió además que la presencia de Banguero en el once inicial lo apoyaría en el trabajo de marca y le daría mayor libertad para sumarse al ataque aunque subrayó que todavía nada estaba definido.
La presión sobre Colombia es grande y Pinto tiene encima a la prensa de su país que se ha pasado los tres días que han pasado analizando las razones de la goleada sufrida ante Paraguay y que además está descontento con elementos que ha introducido el entrenador, entre ellos los entrenamientos a puerta cerrada, a los que no estaban acostumbrados los medios.
El equipo inicial, según aseguró al término de la práctica el segundo entrenador José "Cheché" Hernández, todavía no está decidido y Pinto sólo lo dará a conocer mañana poco antes del partido.
Sin embargo, por lo que alcanzó a verse del entrenamiento desde fuera, hay al menos un cambio que se perfila y que es la salida del volante Alvaro Domínguez, para darle cambio a Jorge Eliécer Banguero con la esperanza de que aporte mayor estabilidad en el centro del campo.
Una novedad es que el delantero Edixon Perea sufre una tendinitis y está siendo tratado por el cuerpo médico con la esperanza de que que pueda estar a disposición mañana.
No obstante, ya ayer Pinto había probado a otras alternativas para acompañar a Hugo Rodallega en la delantera y concretamente a los jugadores Andrés Chitiva y César Valoyes.
En la mañana el equipo había estado paseando en un parque y luego había ido a un centro comercial como medida para bajar la tensión y lograr mayor tranquilidad de cara al compromiso de mañana.
El centrocampista Fabian Vargas, al final del entrenamiento, dijo que lo más importante para Colombia es mantener protegido su portería para conseguir al menos un punto o tres, y seguir con vida en esta Copa América.
"Hay que trabajar con disciplina y mantener resguardado nuestro arco para conseguir al menos un punto o dos y así seguir con vida en esta Copa América", dijo Vargas.
Vargas admitió además que la presencia de Banguero en el once inicial lo apoyaría en el trabajo de marca y le daría mayor libertad para sumarse al ataque aunque subrayó que todavía nada estaba definido.
La presión sobre Colombia es grande y Pinto tiene encima a la prensa de su país que se ha pasado los tres días que han pasado analizando las razones de la goleada sufrida ante Paraguay y que además está descontento con elementos que ha introducido el entrenador, entre ellos los entrenamientos a puerta cerrada, a los que no estaban acostumbrados los medios.