Mexicanos celebran triunfo ante Brasil en el Ángel de la Independencia
Centenares de mexicanos con banderas celebraron hoy en el Ángel de la Independencia el triunfo de México, 0-2 ante Brasil en la Copa América, con lo que parecieron sacudirse la tristeza por el mal paso que traía el equipo.
Pocos minutos después de terminar el encuentro, decidido con anotaciones de Nery Castillo y Ramón Morales, simpatizantes de la selección acudieron al Ángel, en la céntrica avenida Reforma, para hacer una fiesta por el triunfo.
"Canta y no llores" y "Cielito lindo" fueron de las canciones que más se repitieron por los hinchas, muchos de ellos con banderas de México, y que bailaron alrededor del Angel, que hacía tiempo no era escenario de una manifestación por una victoria del fútbol local.
"Era algo inesperado, todos creían que Brasil nos iba a ganar 3-0. Fui de los primeros en llegar y la televisión me filmó mientras bailaba", dijo a Efe Juan Armendaris, un seguidor de las Chivas de Guadalajara presente en el festejo.
Un perro con la camiseta del equipo nacional fue una de las imágenes más simpáticas de la fiesta espontánea que dio la impresión de ser una especie de escape a la frustración vivida hace apenas tres días cuando México perdió la final de la Copa de Oro ante Estados Unidos.
Pocos minutos después de terminar el encuentro, decidido con anotaciones de Nery Castillo y Ramón Morales, simpatizantes de la selección acudieron al Ángel, en la céntrica avenida Reforma, para hacer una fiesta por el triunfo.
"Canta y no llores" y "Cielito lindo" fueron de las canciones que más se repitieron por los hinchas, muchos de ellos con banderas de México, y que bailaron alrededor del Angel, que hacía tiempo no era escenario de una manifestación por una victoria del fútbol local.
"Era algo inesperado, todos creían que Brasil nos iba a ganar 3-0. Fui de los primeros en llegar y la televisión me filmó mientras bailaba", dijo a Efe Juan Armendaris, un seguidor de las Chivas de Guadalajara presente en el festejo.
Un perro con la camiseta del equipo nacional fue una de las imágenes más simpáticas de la fiesta espontánea que dio la impresión de ser una especie de escape a la frustración vivida hace apenas tres días cuando México perdió la final de la Copa de Oro ante Estados Unidos.