Bolivia asume con tranquilidad los entrenamientos tras empate ante Venezuela
Una relajada Bolivia afrontó hoy con suma tranquilidad los entrenamientos tras el empate 2-2 frente a Venezuela, en la Copa América 2007.
En las instalaciones de la cancha de la Universidad de Los Andes (ULA), los titulares del choque con Venezuela hicieron trabajo regenerativo y practicaron fútbol-tenis por aproximadamente 20 minutos.
Luego, el grupo de abridores ante la Vinotinto se trasladó hasta un sauna, mientras que los suplentes siguieron entrenando con labores de reacción y tiros al arco.
El técnico Erwin "Platiní" Sánchez, expresó a EFE su confianza en seguir sumando experiencia para afrontar el próximo encuentro a Uruguay.
"Estamos muy tranquilos con el trabajo de todo el equipo, sólo esperamos seguir cosechando logros en el próximo encuentro con Uruguay", indicó Sánchez.
Sobre el estado físico de sus jugadores, se refirió a golpes que sufrieron los dos delanteros, Jaime Moreno y Juan Carlos Arce, mientras Jhasmany Campos está más recuperado.
"Moreno y Arce sufrieron golpes de consideración, pero creo que no tendrán problemas para jugar el sábado", concluyó.
Tras el entrenamiento, Sánchez jugó un partido de tenis-fútbol junto con un niño de la ciudad de San Cristóbal, que alegró a la vista de los periodistas presentes.
La bonita jornada para Bolivia estuvo salpicada por la decisión de la FIFA de jugar hasta los 3.000 metros de altura, que deja fuera de las eliminatorias a La Paz.
Esa reacción oficial llegó a través presidente de la Federación Boliviana de Fútbol, Carlos Chávez, que expresó su descontento con la decisión de la FIFA de mantener la prohibición de jugar en altura los partidos de eliminatorias para el Mundial.
"Algo huele mal en la Conmebol (Confederación Sudamericana) por esta decisión. No entendemos cómo si los diez países estaban de acuerdo a apoyar jugar en la altura, se determine esta posición en la FIFA", dijo Chávez.
En las instalaciones de la cancha de la Universidad de Los Andes (ULA), los titulares del choque con Venezuela hicieron trabajo regenerativo y practicaron fútbol-tenis por aproximadamente 20 minutos.
Luego, el grupo de abridores ante la Vinotinto se trasladó hasta un sauna, mientras que los suplentes siguieron entrenando con labores de reacción y tiros al arco.
El técnico Erwin "Platiní" Sánchez, expresó a EFE su confianza en seguir sumando experiencia para afrontar el próximo encuentro a Uruguay.
"Estamos muy tranquilos con el trabajo de todo el equipo, sólo esperamos seguir cosechando logros en el próximo encuentro con Uruguay", indicó Sánchez.
Sobre el estado físico de sus jugadores, se refirió a golpes que sufrieron los dos delanteros, Jaime Moreno y Juan Carlos Arce, mientras Jhasmany Campos está más recuperado.
"Moreno y Arce sufrieron golpes de consideración, pero creo que no tendrán problemas para jugar el sábado", concluyó.
Tras el entrenamiento, Sánchez jugó un partido de tenis-fútbol junto con un niño de la ciudad de San Cristóbal, que alegró a la vista de los periodistas presentes.
La bonita jornada para Bolivia estuvo salpicada por la decisión de la FIFA de jugar hasta los 3.000 metros de altura, que deja fuera de las eliminatorias a La Paz.
Esa reacción oficial llegó a través presidente de la Federación Boliviana de Fútbol, Carlos Chávez, que expresó su descontento con la decisión de la FIFA de mantener la prohibición de jugar en altura los partidos de eliminatorias para el Mundial.
"Algo huele mal en la Conmebol (Confederación Sudamericana) por esta decisión. No entendemos cómo si los diez países estaban de acuerdo a apoyar jugar en la altura, se determine esta posición en la FIFA", dijo Chávez.