La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), a través de su presidente Alejandro Domínguez, confirmó que la final entre River Plate y Boca Juniors quedó suspendida. Esto por acuerdo entre los máximos dirigentes de los clubes y luego de los ataques de los fanáticos 'millonarios' al autobús que transportaba a los jugadores 'xeneixes'.
"Estamos en una situación por culpa de unos desadaptados, que no entienden que esto es un deporte. Esto no es fútbol. hay un pedido de ambos clubes. Se desnaturalizó el juego. El uno no quiere jugar y el otro no quiere ganar de esta forma", mencionó Domínguez a los medios de comunicación.
El compromiso se jugará este domingo desde las 15h00 (hora Ecuador).