Ex presidente de Federación Francesa de Fútbol condenado por falsear cuentas.
El presidente de la Federación Francesa de Fútbol(FFF) Claude Simonet fue condenado hoy a una pena de seis años de cárcel exentos de cumplimiento y a una multa de 10.000 euros por haber maquillado las cuentas del organismo en la temporada en 2003.
El Tribunal Correccional de París aceptó la petición de la Fiscalía contra el que fuera máximo dirigente del fútbol galo entre 1994 y 2005, que cuenta en su haber con el triunfo de la selección francesa en el Mundial de 1998 pero también con el fracaso cosechado cuatro años más tarde.
El tesorero de la FFF en el momento de los hechos, Bernard Bacourt, por su parte, fue condenado a tres meses de cárcel sin cumplimiento y 5.000 euros de multa.
Fueron las cuentas de 2002 las que han provocado los problemas judiciales de Simonet, que en ningún momento fue acusado de haberse llevado dinero.
Lo que hizo el ex presidente de la FFF fue adelantar unos ingresos por televisión del año siguiente al ejercicio de 2003, con el fin de ocultar un déficit que hubiera provocado una mala imagen de la organización, mancillada por el mal papel de la selección en el Mundial de Japón y Corea del Sur.
Los "bleus" fracasaron en esa cita, donde llegaron como favoritos y se marcharon sin marcar ningún gol, y el nombre de Simonet estaba en el centro de muchas críticas de despilfarro.
En aquellos días, la prensa reveló suntuosos gastos de la delegación francesa durante su estancia en Seúl, en particular, causó mucho escándalo la factura de 4.800 euros presentada por Simonet por una botella de vino.
En las cuentas de 2002-2003, la FFF presentó un déficit de 63.000 euros, frente al real que alcanzaba los 13,9 millones, una disfunción revelada inicialmente por el Tribunal de Cuentas. EFE
El Tribunal Correccional de París aceptó la petición de la Fiscalía contra el que fuera máximo dirigente del fútbol galo entre 1994 y 2005, que cuenta en su haber con el triunfo de la selección francesa en el Mundial de 1998 pero también con el fracaso cosechado cuatro años más tarde.
El tesorero de la FFF en el momento de los hechos, Bernard Bacourt, por su parte, fue condenado a tres meses de cárcel sin cumplimiento y 5.000 euros de multa.
Fueron las cuentas de 2002 las que han provocado los problemas judiciales de Simonet, que en ningún momento fue acusado de haberse llevado dinero.
Lo que hizo el ex presidente de la FFF fue adelantar unos ingresos por televisión del año siguiente al ejercicio de 2003, con el fin de ocultar un déficit que hubiera provocado una mala imagen de la organización, mancillada por el mal papel de la selección en el Mundial de Japón y Corea del Sur.
Los "bleus" fracasaron en esa cita, donde llegaron como favoritos y se marcharon sin marcar ningún gol, y el nombre de Simonet estaba en el centro de muchas críticas de despilfarro.
En aquellos días, la prensa reveló suntuosos gastos de la delegación francesa durante su estancia en Seúl, en particular, causó mucho escándalo la factura de 4.800 euros presentada por Simonet por una botella de vino.
En las cuentas de 2002-2003, la FFF presentó un déficit de 63.000 euros, frente al real que alcanzaba los 13,9 millones, una disfunción revelada inicialmente por el Tribunal de Cuentas. EFE