Continuando con el doblete en el estadio Modelo Alberto Spencer por la décima novena fecha del Campeonato Ecuatoriano, Emelec enfrentó al Deportivo Cuenca en un partido que terminó 3-0 a favor de los locales, actuación formidable de Hamilton Piedra que evitó que evitó que el marcador termine más abultado.
En el arranque del encuentro fue el cuadro visitante el que se lanzó en busca del arco rival, pues cuando apenas había transcurrido 1 minuto Walter Chalá recibía el esférico desde la banda izquierda y al momento de rematar no puedo con la defensa eléctrica que la mandó al córner.
Todo parecía que iban a ser los ‘morlacos’ los que iban a dirigir las jugadas de peligro, pero rápidamente los locales empezaron a dominar con jugadas claras, pero era el portero Hamilton Piedra el que evitaba que se abra el marcador.
Al minuto 29 un gravísimo error en la zaga por parte de Ronald Johnson terminó con Ángel Mena en un mano a mano con el portero, que nuevamente volvía a evitar el tanto enviando el esférico al tiro de esquina con el pie.
Para el segundo tiempo Emelec se con más ímpetu en busca de abrir el marcador, por lo que al minuto 47 ya ponía la primera del partido, nuevamente era Mena el que se escapaba por la banda derecha para enviar un centro preciso para que Denis Stracqualursi se eleve y la mande a guardar con un remate de cabeza.
Con el marcador a su favor el ‘bombillo’ se llenó de confianza y empezó a llegar más al arco de Piedra, poniendo la segunda al minuto 55 por medio de Jorge Guagua, quien recibió de Quiñónez controlándola con el pecho para lanzarse una ‘chilenita’ que tomó desprevenido al portero.
Los locales continuaron con el asedio al arco rival, pero nuevamente era Piedra el que evitaba en más de una ocasión que el marcador sea más abultado. A los 78 Stracqualursi recibía incómodo un pase cruzado desde la banda derecha, por lo que el portero, que ya se había jugada al palo bajo, tiró de puro reflejos para sacarla en la línea.
Por su parte el Deportivo Cuenca era poco o nada lo que podía hacer ante el gran cerrojo que presentó la zaga ‘eléctrica’, paseas a profundidad y corridas por las bandas eran rápidamente contenidas por la defensa.
Ya para terminar el partido, al minuto 88, Ángel Mena ponía la cereza del pastel con un espectacular golazo, Bagüí ingresaba por la banda derecha para centrar el esférico a Mena que definía de volea para enfundarla en el arco.