Médicos descartan en principio que Maradona tenga pancreatitis.
Los médicos que atendieron hoy de urgencia a Diego Maradona descartaron en principio que el ex futbolista tenga un cuadro de pancreatitis crónica, aunque recomendaron que el paciente siga bajo observación.
Oscar Cicco, director del hospital Madre Teresa de Calcuta de la localidad de Ezeiza, donde Maradona fue ingresado esta madrugada, dijo en rueda de prensa que el paciente "está estable" y fuera de peligro, aunque recomendó que permanezca bajo vigilancia médica de dos a tres días más.
Cicco confirmó que Maradona será trasladado en breve a una clínica de Buenos Aires a petición de su médico personal, Alfredo Cahe.
El director del hospital de Ezeiza (30 kilómetros al sur de Buenos Aires) dijo que el ex deportista ingresó con un "fuerte dolor abdominal", fue examinado por los médicos de guardia y, "por sus antecedentes", fue derivado a la unidad de cuidados intensivos.
Allí se le practicaron varios exámenes y se le medicó para calmarle los dolores.
Cicco dijo que los análisis iniciales no "arrojan patología alguna" por lo que descartan una "eventual pancreatitis tóxica", aunque aclaro que se deben hacer nuevos estudio para ver la evolución del cuadro.
En tanto, dijo que la afección hepática crónica que sufre el paciente está "controlada".
En cuanto al estado de ánimo del ex deportista, el médico dijo que aunque Maradona manifestó "preocupación y dolor", se mostró "muy colaborador en todo momento" con el personal sanitario.
Maradona aseguró a los médicos que no comió ni tomó "nada extraño", que siguió la dieta prescrita y que el dolor abdominal "apareció de repente".
El ex astro del fútbol argentino había abandonado el sanatorio Güemes de la capital argentina el miércoles pasado después de estar dos semanas ingresado a consecuencia de una hepatitis aguda tóxica por consumo de alcohol.
Tras ser dado de alta, Maradona se había mudado a una finca a las afueras de Buenos Aires, desde donde hoy a las 4.45 horas local (7.45 GMT) fue trasladado en ambulancia hasta el hospital de Ezeiza.
Oscar Cicco, director del hospital Madre Teresa de Calcuta de la localidad de Ezeiza, donde Maradona fue ingresado esta madrugada, dijo en rueda de prensa que el paciente "está estable" y fuera de peligro, aunque recomendó que permanezca bajo vigilancia médica de dos a tres días más.
Cicco confirmó que Maradona será trasladado en breve a una clínica de Buenos Aires a petición de su médico personal, Alfredo Cahe.
El director del hospital de Ezeiza (30 kilómetros al sur de Buenos Aires) dijo que el ex deportista ingresó con un "fuerte dolor abdominal", fue examinado por los médicos de guardia y, "por sus antecedentes", fue derivado a la unidad de cuidados intensivos.
Allí se le practicaron varios exámenes y se le medicó para calmarle los dolores.
Cicco dijo que los análisis iniciales no "arrojan patología alguna" por lo que descartan una "eventual pancreatitis tóxica", aunque aclaro que se deben hacer nuevos estudio para ver la evolución del cuadro.
En tanto, dijo que la afección hepática crónica que sufre el paciente está "controlada".
En cuanto al estado de ánimo del ex deportista, el médico dijo que aunque Maradona manifestó "preocupación y dolor", se mostró "muy colaborador en todo momento" con el personal sanitario.
Maradona aseguró a los médicos que no comió ni tomó "nada extraño", que siguió la dieta prescrita y que el dolor abdominal "apareció de repente".
El ex astro del fútbol argentino había abandonado el sanatorio Güemes de la capital argentina el miércoles pasado después de estar dos semanas ingresado a consecuencia de una hepatitis aguda tóxica por consumo de alcohol.
Tras ser dado de alta, Maradona se había mudado a una finca a las afueras de Buenos Aires, desde donde hoy a las 4.45 horas local (7.45 GMT) fue trasladado en ambulancia hasta el hospital de Ezeiza.