Romario buscará su milésimo gol pese al clima poco festivo en Vasco.
El veterano delantero Romario tendrá mañana una nueva oportunidad de anotar su milésimo gol en el estadio Maracaná de Río de Janeiro, en el partido en que el Vasco da Gama y el Botafogo se medirán en una de las semifinales de la Copa de Río de Janeiro.
Pese a que los familiares y amigos del jugador de 41 años anunciaron que pretenden conmemorar la posible hazaña en una discoteca ya reservada en Río de Janeiro, el clima ya no es tan festivo en el Vasco, en donde la obsesión por el milésimo gol del mejor jugador del Mundial de 1994 generó una crisis.
Ante una dura respuesta de Romario a las declaraciones de algunos de sus compañeros de que la obsesión por el milésimo gol está perjudicando el rendimiento del equipo, el propio presidente del Vasco, Eurico Miranda, impuso la "ley de la mordaza" y prohibió cualquier entrevista con periodistas.
El ex delantero del Barcelona español y del PSV Eindhoven holandés, en una demostración de que su intención de anotar el milésimo gol cuenta con el total respaldo de los dirigentes del Vasco, dijo la víspera que quienes están descontentos en el club pueden abandonarlo.
El recado tenía como destinatario entre otros al técnico Renato Gaúcho y al delantero Leandro Amaral, quienes han atribuido las cuatro derrotas consecutivas encajadas por el Vasco da Gama a la presión de los dirigentes para facilitarle las cosas a Romario.
"Durante la semana dijeron muchas bobadas que me incomodaron. Llegaron a decir que estoy perjudicando al Vasco. Algunos jugadores y Renato Gaúcho dijeron que la ansiedad está siendo negativa para los jugadores", se quejó el veterano delantero.
En la polémica terció hasta la madre de Romario, "doña" Lita, quien pidió hoy la destitución del técnico del Vasco da Gama y dijo que el bajo rendimiento del equipo es responsabilidad del entrenador y de los demás jugadores y no de su hijo.
La de mañana será la cuarta oportunidad que tendrá Romario para cumplir su sueño de llegar al milésimo gol en el Maracaná, el legendario estadio en el que Pelé llegó a su gol mil en 1969.
El delantero anotó hace dos semanas el que, según sus cuentas, fue su gol número 999, en partido contra el Flamengo en el Maracaná y desde entonces ha fallado en otras dos oportunidades para llegar al milésimo en este templo del fútbol mundial.
Tras fracasar en su intento de lograr la hazaña frente al Flamengo, el mayor rival histórico del Vasco da Gama, tampoco lo logró frente al Botafogo en un clásico carioca ni ante el Gama en partido por la Copa de Brasil.
Mañana volverá a intentarlo de nuevo ante el Botafogo y su alineación como titular ya fue confirmada por el presidente del Vasco da Gama pese a que el técnico del equipo está preocupado con una posible derrota que elimine al club del llamado Campeonato Carioca.
Los administradores del Maracaná y el Comité Arbitral ya anunciaron que, en caso de que Romario anote su milésimo gol, el partido será paralizado temporalmente para que el delantero pueda dar unas declaraciones a periodistas y recibir algunas medallas conmemorativas.
Pese a su supuesta imparcialidad, el árbitro del partido de mañana, Fabio Calabria, dijo que, si Romario consigue su hazaña, pretende quedarse con el balón del milésimo gol.
"Quiero quedarme con el balón del partido. Será una emoción muy grande. Si Romario anota voy a poder contarle a mis nietos que pité el milésimo gol. Él es un baluarte. Ojalá que sea en este partido que llegue el gol mil", aseguró el referí.
Pese a que los familiares y amigos del jugador de 41 años anunciaron que pretenden conmemorar la posible hazaña en una discoteca ya reservada en Río de Janeiro, el clima ya no es tan festivo en el Vasco, en donde la obsesión por el milésimo gol del mejor jugador del Mundial de 1994 generó una crisis.
Ante una dura respuesta de Romario a las declaraciones de algunos de sus compañeros de que la obsesión por el milésimo gol está perjudicando el rendimiento del equipo, el propio presidente del Vasco, Eurico Miranda, impuso la "ley de la mordaza" y prohibió cualquier entrevista con periodistas.
El ex delantero del Barcelona español y del PSV Eindhoven holandés, en una demostración de que su intención de anotar el milésimo gol cuenta con el total respaldo de los dirigentes del Vasco, dijo la víspera que quienes están descontentos en el club pueden abandonarlo.
El recado tenía como destinatario entre otros al técnico Renato Gaúcho y al delantero Leandro Amaral, quienes han atribuido las cuatro derrotas consecutivas encajadas por el Vasco da Gama a la presión de los dirigentes para facilitarle las cosas a Romario.
"Durante la semana dijeron muchas bobadas que me incomodaron. Llegaron a decir que estoy perjudicando al Vasco. Algunos jugadores y Renato Gaúcho dijeron que la ansiedad está siendo negativa para los jugadores", se quejó el veterano delantero.
En la polémica terció hasta la madre de Romario, "doña" Lita, quien pidió hoy la destitución del técnico del Vasco da Gama y dijo que el bajo rendimiento del equipo es responsabilidad del entrenador y de los demás jugadores y no de su hijo.
La de mañana será la cuarta oportunidad que tendrá Romario para cumplir su sueño de llegar al milésimo gol en el Maracaná, el legendario estadio en el que Pelé llegó a su gol mil en 1969.
El delantero anotó hace dos semanas el que, según sus cuentas, fue su gol número 999, en partido contra el Flamengo en el Maracaná y desde entonces ha fallado en otras dos oportunidades para llegar al milésimo en este templo del fútbol mundial.
Tras fracasar en su intento de lograr la hazaña frente al Flamengo, el mayor rival histórico del Vasco da Gama, tampoco lo logró frente al Botafogo en un clásico carioca ni ante el Gama en partido por la Copa de Brasil.
Mañana volverá a intentarlo de nuevo ante el Botafogo y su alineación como titular ya fue confirmada por el presidente del Vasco da Gama pese a que el técnico del equipo está preocupado con una posible derrota que elimine al club del llamado Campeonato Carioca.
Los administradores del Maracaná y el Comité Arbitral ya anunciaron que, en caso de que Romario anote su milésimo gol, el partido será paralizado temporalmente para que el delantero pueda dar unas declaraciones a periodistas y recibir algunas medallas conmemorativas.
Pese a su supuesta imparcialidad, el árbitro del partido de mañana, Fabio Calabria, dijo que, si Romario consigue su hazaña, pretende quedarse con el balón del milésimo gol.
"Quiero quedarme con el balón del partido. Será una emoción muy grande. Si Romario anota voy a poder contarle a mis nietos que pité el milésimo gol. Él es un baluarte. Ojalá que sea en este partido que llegue el gol mil", aseguró el referí.