El fuerte calor de Puerto La Cruz obligó a Chile a acortar su entrenamiento
La selección de Chile debió acortar hoy
el primer entrenamiento del día por el fuerte calor que afecta a la
ciudad portuaria de Puerto La Cruz, sede del partido del próximo
jueves ante Venezuela, en la sexta jornada de las eliminatorias
sudamericanas del Mundial de Sudáfrica 2010.
Los chilenos, bajo la conducción del argentino Marcelo Bielsa, llegaron a la cancha alterna del estadio 'José Antonio Anzoátegui' a primeras horas de la mañana, encontrándose una temperatura que bordeaba los 34 grados centígrados.
Esa situación trastocó los planes de Bielsa, que redujo el entrenamiento a media hora porque muchos jugadores sintieron el rigor del clima, después del partido que el equipo chileno ganó 2-0 el pasado domingo al de Bolivia, en la baja temperatura de La Paz.
Muchos de los convocados de la 'Roja' se quejaron del cambio de ambiente, a sólo cuarenta y ocho horas del partido ante los venezolanos.
El portero chileno Claudio Bravo, de la Real Sociedad de España, declaró a medios locales que tendrán que forzar la marcha para llegar aclimatados al compromiso del jueves.
"No es fácil pasar del frío de Chile y de Bolivia para llegar a estas altas temperaturas. Tenemos que adaptarnos rápido porque los puntos ante Venezuela son claves", aseguró Bravo.
El cuerpo técnico y médico de la selección chilena mantienen el pronóstico reservado sobre la situación de Mark González, afectado por una pubalgia, por lo que se mantiene en duda para el partido del jueves.
Aunque aún no hay nada definido, Bielsa pudiera decantarse por la misma formación que ganó 2-0 a Bolivia en La Paz o realizar varios cambios para mitigar el cansancio acumulado de sus dirigidos.
Por su parte, los jugadores de Venezuela, muchos de los cuales están más acostumbrados a la humedad en esta época del año, se siguen entrenando con ánimo y ganas de volver a sumar puntos en condición de local.
El ariete Juan Arango consideró que Chile es un rival muy complicado al que tendrán que cuidar desde su salida.
"Tenemos que preocuparnos de nosotros y no de Chile. Ellos vienen de hacer un buen partido con Bolivia pero creo que todo dependerá de nosotros mismos para seguir con la racha", argumentó el delantero.
Ambas selecciones tienen programado realizar el miércoles en horas de la noche su última práctica cerca de la hora del partido, cuando ya aminora el calor reinante en Puerto La Cruz.
El partido del jueves está programado a las 20.00 horas locales (00.30 GMT del viernes) con el arbitraje del uruguayo Roberto Silvera. EFE
Los chilenos, bajo la conducción del argentino Marcelo Bielsa, llegaron a la cancha alterna del estadio 'José Antonio Anzoátegui' a primeras horas de la mañana, encontrándose una temperatura que bordeaba los 34 grados centígrados.
Esa situación trastocó los planes de Bielsa, que redujo el entrenamiento a media hora porque muchos jugadores sintieron el rigor del clima, después del partido que el equipo chileno ganó 2-0 el pasado domingo al de Bolivia, en la baja temperatura de La Paz.
Muchos de los convocados de la 'Roja' se quejaron del cambio de ambiente, a sólo cuarenta y ocho horas del partido ante los venezolanos.
El portero chileno Claudio Bravo, de la Real Sociedad de España, declaró a medios locales que tendrán que forzar la marcha para llegar aclimatados al compromiso del jueves.
"No es fácil pasar del frío de Chile y de Bolivia para llegar a estas altas temperaturas. Tenemos que adaptarnos rápido porque los puntos ante Venezuela son claves", aseguró Bravo.
El cuerpo técnico y médico de la selección chilena mantienen el pronóstico reservado sobre la situación de Mark González, afectado por una pubalgia, por lo que se mantiene en duda para el partido del jueves.
Aunque aún no hay nada definido, Bielsa pudiera decantarse por la misma formación que ganó 2-0 a Bolivia en La Paz o realizar varios cambios para mitigar el cansancio acumulado de sus dirigidos.
Por su parte, los jugadores de Venezuela, muchos de los cuales están más acostumbrados a la humedad en esta época del año, se siguen entrenando con ánimo y ganas de volver a sumar puntos en condición de local.
El ariete Juan Arango consideró que Chile es un rival muy complicado al que tendrán que cuidar desde su salida.
"Tenemos que preocuparnos de nosotros y no de Chile. Ellos vienen de hacer un buen partido con Bolivia pero creo que todo dependerá de nosotros mismos para seguir con la racha", argumentó el delantero.
Ambas selecciones tienen programado realizar el miércoles en horas de la noche su última práctica cerca de la hora del partido, cuando ya aminora el calor reinante en Puerto La Cruz.
El partido del jueves está programado a las 20.00 horas locales (00.30 GMT del viernes) con el arbitraje del uruguayo Roberto Silvera. EFE