Brasil busca convencer a su exigente afición ante un Uruguay urgido de puntos
La selección brasileña intentará mañana
convencer a una afición apática y exigente frente a un Uruguay que
llega a la cuarta jornada de las eliminatorias sudamericanas del
Mundial'2010 urgido de puntos, tras su amargo empate contra Chile.
Si las cosas con la hinchada uruguaya están feas para el equipo que dirige Oscar Washington Tabárez, no están mejor para Brasil, que está obligado a ganar siempre, más aún jugando en casa y cuando no ha terminado de exhibir en estas eliminatorias el "juego bonito" que siempre se le reclama.
El equipo de Carlos Caetano Bledorn Verri 'Dunga' tiene en estas tres primeras jornadas un balance poco convincente: empató 0-0 ante Colombia en Bogotá, goleó por 5-0 a Ecuador, el equipo más débil del torneo, en un partido con muchos goles pero pocos destellos; e igualó contra Perú en Lima (1-1).
Uruguay, por su parte, tampoco ha hecho mucho. Debutó goleando 5-0 a Bolivia, pero luego perdió con Paraguay (1-0) y empató en casa en forma agónica ante Chile (2-2), en un compromiso que dejó enormes dudas sobre su verdadero potencial.
Esta nueva edición de uno de los clásicos sudamericanos se jugará en el estadio Morumbí, de Sao Paulo, que mañana deberá estar colmado por cerca de 80.000 aficionados, en su enorme mayoría dispuestos a alentar o abuchear a rabiar a Ronaldinho Gaúcho, Kaká, Robinho y compañía, según cómo se desempeñen esta vez.
El trío de estrellas brasileñas ha mostrado solamente algunos chispazos de la habilidad que atesora en estas eliminatorias y está en la mira de la exigente crítica brasileña, que no se convence sólo con victorias y espera un derroche de talento para cerrar el año en paz.
Dunga, que como técnico arrastra la misma fama de duro que tenía como jugador, ha defendido a su equipo una y otra vez e insistido en que lo único importante ahora es permanecer en el grupo de cuatro primeros, que garantizarán un billete para Sudáfrica'2010.
Para el partido de mañana, Dunga tiene como única duda quién será el sustituto del defensa central Lucio, que vio su segunda tarjeta amarilla en Lima y está suspendido.
El favorito para jugar junto al efectivo Juan es Alex, central del Chelsea inglés, que hoy declaró que está "listo para cumplir" si Dunga lo elige como titular.
Tabárez, por su parte, se verá obligado a más de una alteración.
El centrocampista Diego Pérez no se recuperó de una contractura muscular que sufrió el domingo frente a Chile y será reemplazado por Egidio Arévalo Ríos.
También es posible que Maximiliano Pereira ceda su puesto en la defensa a Andrés Scotti y que el volante Ignacio González entre en lugar del delantero Vicente Sánchez, a fin de facilitar la adopción del esquema 4-4-2 que Uruguay utiliza cuando juega como visitante.
El mayor peso en la ofensiva volverá a caer sobre los hombros de Sebastián Abreu, que tuvo contra Chile una actuación irregular, pese a que fue peligroso como siempre.
Alineaciones probables:
Brasil: Julio César; Maicon, Alex o Naldo, Juan, Gilberto; Gilberto Silva, Mineiro, Ronaldinho Gaucho, Kaká; Robinho y Vágner Love. Seleccionador: Dunga.
Uruguay: Fabián Carini; Maximiliano Pereira o Andrés Scotti, Diego Godín, Diego Lugano, Jorge Fucile; Egidio Arévalo Ríos, Walter Gargano, Ignacio González o Vicente Sánchez, Cristian Rodríguez; Sebastián Abreu y Luis Suárez. Seleccionador: Oscar Washington Tabárez.
Árbitro: El argentino Héctor Baldassi, quien será asistido por sus compatriotas Rodolfo Otero y Ricardo Casas.
Estadio: Cícero Pompeu de Toledo "Morumbí", de Sao Paulo.
Hora: 21.45 hora local (23.45 GMT).
Si las cosas con la hinchada uruguaya están feas para el equipo que dirige Oscar Washington Tabárez, no están mejor para Brasil, que está obligado a ganar siempre, más aún jugando en casa y cuando no ha terminado de exhibir en estas eliminatorias el "juego bonito" que siempre se le reclama.
El equipo de Carlos Caetano Bledorn Verri 'Dunga' tiene en estas tres primeras jornadas un balance poco convincente: empató 0-0 ante Colombia en Bogotá, goleó por 5-0 a Ecuador, el equipo más débil del torneo, en un partido con muchos goles pero pocos destellos; e igualó contra Perú en Lima (1-1).
Uruguay, por su parte, tampoco ha hecho mucho. Debutó goleando 5-0 a Bolivia, pero luego perdió con Paraguay (1-0) y empató en casa en forma agónica ante Chile (2-2), en un compromiso que dejó enormes dudas sobre su verdadero potencial.
Esta nueva edición de uno de los clásicos sudamericanos se jugará en el estadio Morumbí, de Sao Paulo, que mañana deberá estar colmado por cerca de 80.000 aficionados, en su enorme mayoría dispuestos a alentar o abuchear a rabiar a Ronaldinho Gaúcho, Kaká, Robinho y compañía, según cómo se desempeñen esta vez.
El trío de estrellas brasileñas ha mostrado solamente algunos chispazos de la habilidad que atesora en estas eliminatorias y está en la mira de la exigente crítica brasileña, que no se convence sólo con victorias y espera un derroche de talento para cerrar el año en paz.
Dunga, que como técnico arrastra la misma fama de duro que tenía como jugador, ha defendido a su equipo una y otra vez e insistido en que lo único importante ahora es permanecer en el grupo de cuatro primeros, que garantizarán un billete para Sudáfrica'2010.
Para el partido de mañana, Dunga tiene como única duda quién será el sustituto del defensa central Lucio, que vio su segunda tarjeta amarilla en Lima y está suspendido.
El favorito para jugar junto al efectivo Juan es Alex, central del Chelsea inglés, que hoy declaró que está "listo para cumplir" si Dunga lo elige como titular.
Tabárez, por su parte, se verá obligado a más de una alteración.
El centrocampista Diego Pérez no se recuperó de una contractura muscular que sufrió el domingo frente a Chile y será reemplazado por Egidio Arévalo Ríos.
También es posible que Maximiliano Pereira ceda su puesto en la defensa a Andrés Scotti y que el volante Ignacio González entre en lugar del delantero Vicente Sánchez, a fin de facilitar la adopción del esquema 4-4-2 que Uruguay utiliza cuando juega como visitante.
El mayor peso en la ofensiva volverá a caer sobre los hombros de Sebastián Abreu, que tuvo contra Chile una actuación irregular, pese a que fue peligroso como siempre.
Alineaciones probables:
Brasil: Julio César; Maicon, Alex o Naldo, Juan, Gilberto; Gilberto Silva, Mineiro, Ronaldinho Gaucho, Kaká; Robinho y Vágner Love. Seleccionador: Dunga.
Uruguay: Fabián Carini; Maximiliano Pereira o Andrés Scotti, Diego Godín, Diego Lugano, Jorge Fucile; Egidio Arévalo Ríos, Walter Gargano, Ignacio González o Vicente Sánchez, Cristian Rodríguez; Sebastián Abreu y Luis Suárez. Seleccionador: Oscar Washington Tabárez.
Árbitro: El argentino Héctor Baldassi, quien será asistido por sus compatriotas Rodolfo Otero y Ricardo Casas.
Estadio: Cícero Pompeu de Toledo "Morumbí", de Sao Paulo.
Hora: 21.45 hora local (23.45 GMT).