Se entrega barra brava de Boca condenado a prisión.
El líder de la "barra brava" (hinchas violentos) del Boca Juniors, Rafael Di Zeo, condenado a prisión, se entregó hoy a la policía después de permanecer durante veinte días prófugo.
Di Zeo fue condenado a cuatro años y tres meses de prisión por la comisión del delito de "coacción agravada por el uso de armas" en un choque entre hinchas boquenses y del Chacarita Juniors ocurrido en 1999 mientras se disputaba un partido amistoso entre los equipos de ambos clubes.
También se entregaron hoy otros dos miembros el grupo, Fabián Kruguer y Marcelo Rodríguez, con lo cual sólo queda prófugo uno, Juan Castro, de los seis condenados por el mismo episodio, ya que la semana pasada lo habían hecho Fernando Di Zeo y Gustavo Pereyra.
La "barra brava" del Boca Juniors ha quedado descabezada, aunque Di Zeo ha designado a un sucesor que deberá dirimir el liderato del grupo ultra con otros candidatos, todos hinchas profesionales a los que millares de aficionados comunes rinden pleitesía.
Di Zeo y varios de los condenados que en las próximas horas serán trasladados a la cárcel, son también investigados por "asociación ilícita", delito por el que podrían ser condenados a penas de entre cinco y diez años de prisión.
La corte Suprema de Justicia rechazó recientemente los recursos presentados por la defensa de Di Zeo, quien pretendía permanecer en libertad.
Dirigentes de Boca Juniors reclamaron la expulsión de los registros del club de los hinchas violentos condenados, medida que deben considerar el Tribunal de Disciplina y la Asamblea de Representantes del club.
Di Zeo y sus secuaces pidieron a la justicia que, por razones de seguridad, no los destinen al penal porteño de Villa Devoto, donde cumplen condenas ex miembros de la "barra brava" boquense por el asesinato de dos hinchas del River Plate, enfrentados con la actual cúpula ultra.
También están en problemas los principales miembros del grupo de hinchas violentos del River Plate, que el mes pasado protagonizaron dentro del club un choque con disidentes en el que hubo heridos por el uso de armas de fuego y blancas, y son investigados por la justicia.
En momentos en que Di Zeo y otros condenados se entregaban hoy a la policía, numerosos hinchas los alentaron e insultaron a la justicia.
Di Zeo fue condenado a cuatro años y tres meses de prisión por la comisión del delito de "coacción agravada por el uso de armas" en un choque entre hinchas boquenses y del Chacarita Juniors ocurrido en 1999 mientras se disputaba un partido amistoso entre los equipos de ambos clubes.
También se entregaron hoy otros dos miembros el grupo, Fabián Kruguer y Marcelo Rodríguez, con lo cual sólo queda prófugo uno, Juan Castro, de los seis condenados por el mismo episodio, ya que la semana pasada lo habían hecho Fernando Di Zeo y Gustavo Pereyra.
La "barra brava" del Boca Juniors ha quedado descabezada, aunque Di Zeo ha designado a un sucesor que deberá dirimir el liderato del grupo ultra con otros candidatos, todos hinchas profesionales a los que millares de aficionados comunes rinden pleitesía.
Di Zeo y varios de los condenados que en las próximas horas serán trasladados a la cárcel, son también investigados por "asociación ilícita", delito por el que podrían ser condenados a penas de entre cinco y diez años de prisión.
La corte Suprema de Justicia rechazó recientemente los recursos presentados por la defensa de Di Zeo, quien pretendía permanecer en libertad.
Dirigentes de Boca Juniors reclamaron la expulsión de los registros del club de los hinchas violentos condenados, medida que deben considerar el Tribunal de Disciplina y la Asamblea de Representantes del club.
Di Zeo y sus secuaces pidieron a la justicia que, por razones de seguridad, no los destinen al penal porteño de Villa Devoto, donde cumplen condenas ex miembros de la "barra brava" boquense por el asesinato de dos hinchas del River Plate, enfrentados con la actual cúpula ultra.
También están en problemas los principales miembros del grupo de hinchas violentos del River Plate, que el mes pasado protagonizaron dentro del club un choque con disidentes en el que hubo heridos por el uso de armas de fuego y blancas, y son investigados por la justicia.
En momentos en que Di Zeo y otros condenados se entregaban hoy a la policía, numerosos hinchas los alentaron e insultaron a la justicia.