El Corinthians, flamante campeón brasileño de 2005, arrancó la temporada de 2006 con el pie izquierdo al caer el miércoles por 1-0 ante el modesto Noroeste en el estreno de ambos en el Campeonato Paulista.

El Corintihans, encabezado por su astro, el delantero argentino Carlos Tévez, sucumbió ante el desconocido Noroeste, que dominó las acciones durante la mayor parte del partido, disputado en el estadio Alfredo de Castillo, de la ciudad de Baurú.

El gol del triunfo local fue anotado por Luciano Santos a los 38 minutos de juego.

El resultado del partido habría sido otro de no ser porque el árbitro Paulo César de Oliveira no vio un gol legítimo del corinthiano Marcelo Mattos a los 25 minutos, cuando el juego todavía estaba en cero.

Mattos soltó un potente disparo y el balón pegó en la parte baja del travesaño antes de traspasar la línea de gol, tras lo cual fue recuperado por el arquero Mauro, pero los jueces no lo vieron así.

El Corinthians, que en la recta final de la liga brasileña de 2005 fue beneficiado por errores arbitrales, culpó al árbitro de la derrota.

Quiero ver si ahora van a hablar del error de arbitraje contra nuestro equipo, dijo el zaguero Betao, en referencia a los comentarios de la prensa el año pasado, cuando el equipo fue favorecido por las fallas de los árbitros.

Para completar el mal comienzo, el Corinthians terminó el partido con diez jugadores por la expulsión del lateral Gustavo Nery.

El Noroeste-Corinthians fue el partido inaugural del Campeonato Paulista, que disputan 20 equipos del estado de Sao Paulo.