Un equipo de amigos del delantero brasileño Robinho, del Real Madrid, goleó 7-4 al del lateral izquierdo Roberto Carlos, su compañero de club, en un partido benéfico jugado en el estadio Pacaembú, de Sao Paulo.

Para ingresar al estadio cada espectador debía llevar un kilo de alimentos no perecederos y, según la Policía Militar, unas 25.000 personas vieron el partido, lo que significa que se recogieron 25 toneladas que serán donadas a instituciones de beneficencia.

Robinho, que sacudió la red cinco veces, volvió mostrar el juego mágico que le hizo brillar en el Santos y que adeuda en el Real Madrid, e incluso en una de las anotaciones recurrió a la polémica celebración de las cucarachas.

Los otros dos goles del equipo de amigos de Robinho fueron logrados por el lateral Gabriel, que recientemente fue transferido al club español Málaga, y por el músico Leandro.

Por el equipo de Roberto Carlos marcaron su compañero del Real Madrid Julio Baptista, en dos ocasiones; Carlos Alberto (Corinthians) y el jugador de fútbol sala Falcao.

Fue una fiesta muy bonita, manifestó Roberto Carlos, y agregó que lo que importante no era el marcador sino la colaboración con los más necesitados.