La estadounidense Lindsay Davenport debutó con una cómoda victoria en el Abierto de Australia, el primer Grand Slam del año, en tanto que su compatriota Venus Williams protagonizó la sorpresa al quedar eliminada, igual que la rusa Elena Dementieva.

Davenport derrotó por 6-2 y 6-1 a la australiana Casey Dellacqua.

La primera preclasificada, que busca su cuarto título en singles en un Grand Slam y el primero desde que ganó aquí en el 2000, se apuntó servicios ganadores para forzar a tres puntos para partido y aseguró el encuentro con un remate sobre su cabeza.

En su primer encuentro en la cancha central, la número uno del mundo resultó demasiado poderosa para Dellacqua, que con frecuencia abanicaba su raqueta en señal de frustración tras acumular 27 errores no forzados y siete dobles faltas en el partido de 57 minutos.

Ahora Davenport, finalista aquí y en Wimbledon el año pasado, enfrentará a la croata Karolina Sprem, quien venció por 6-4 y 6-2 a la ucraniana Alyona Bondarenko.

Siento que estoy lista para los retos, dijo Davenport, de 29 años. Creo que tengo la capacidad de jugar bien y espero repetir lo que pasó el año pasado y hacerlo incluso mejor.