Por difícil que parezca su rival de la primera ronda, Martina Hingis está complacida porque enfrentará a alguien que no ha jugado tanto como ella en el último mes.

Así es como visualiza la ganadora de cinco Grand Slam, que regresa al circuito luego de tres años de ausencia, su partido del lunes contra la última campeona de Roland Garros, Justin Henin-Hardenne, en el torneo Internacional de Sydney.

Una no puede ocultarse, dijo Hingis, que ganó tres partidos antes de perder en la semifinal de Costa de Oro, el torneo que marcó su regreso la semana pasada.

Tarde o temprano tengo que jugar con una de las primeras diez del mundo, y cuanto antes, mejor. Gane o pierda, una sabe dónde está parada.

Henin-Hardenne es la quinta cabeza de serie. En la temporada pasada cayó al octavo puesto después que una lesión en los músculos de la corva en el Abierto de Estados Unidos le impidió jugar durante los últimos tres meses.

Hingis se retiró en 2002 y no volvió a jugar debido a lesiones de pie y talón.

Henin-Hardenne tampoco juega desde hace tiempo, dijo Hingis. Este año yo he jugado más partidos que ella, eso es una ventaja.

Hingis se impuso en los dos partidos previos entre ambas, los dos en 2000, cuando Henin-Hardenne hacía su aparición en la escena internacional.

Las dos han sido número uno y ganado tanto el Abierto de Australia como el Internacional de Sydney.

Hingis ganó el Abierto tres veces consecutivas a partir de 1997, luego perdió las tres finales siguientes antes de retirarse.