Con poco fútbol Villarreal y Real Madrid.

Enviado por roberto el Dom, 08/01/2006 - 18:30

El Villarreal y el Real Madrid firmaron un empate sin goles, que de poco les sirve a ambos equipos ante el frenético ritmo impuesto por el Barcelona en la clasificación, tras un encuentro con muchos altibajos, en el que cualquiera de los dos equipos pudo llevarse la victoria y que permite a los madridistas seguir invictos ante los castellonenses.

El Real Madrid mostró un buen planteamiento táctico, con mucha posesión del balón y anulando bien al cerebro villarrealense, el argentino Román Riquelme, aunque la temprana lesión de Ronaldo destapó las carencias ante el gol cuando no esta presente el ariete brasileño.

El partido comenzó con poco ritmo por parte local, ya que el Madrid estrechó sus líneas en el centro del campo y cortó el suministro de balones a los delanteros del Villarreal, mientras que salía con rápidos contragolpes que provocaron que el equipo que dirige el chileno Manuel Pellegrini se viera obligado a tomar una mayor precaución defensiva.

La tranquilidad en el transcurrir del choque se rompió cuando por fin empezó a tomar Riquelme un mayor contacto con el balón. Así, el argentino, tras una gran jugada, a punto estuvo de inaugurar el marcador a los 21 minutos con un colocado disparo. A partir de ese instante comenzaron las hostilidades.

La presión en la medular de ambos equipos se esfumó y el partido fue un constante ir y venir de un área a otra con ocasiones de gol para unos y otros.

Si Javi Venta y el uruguayo Diego Forlán las tuvieron para el Villarreal, el francés Zinedine Zidane y el brasileño Julio Baptista disfrutaron de las mejores opciones madridistas.

El cuerpo a cuerpo en el que había entrado el partido se acabó coincidiendo con la lesión de Ronaldo, que se resintió de sus molestias y abandonó el terreno de juego, permitiendo el debut en la Liga española de su compatriota Cicinho.

Sin Ronaldo en el campo, fue Baptista el que tomó la responsabilidad ofensiva de los madridistas, pero el brasileño evidenció de nuevo que aún esta lejos de alcanzar el nivel con el que deslumbró en su etapa en el Sevilla.

Mientras, el Villarreal volvió a perderse en la línea de creación de juego y tan sólo dos lanzamientos de falta de Riquelme inquietaron a Iker Casillas antes de llegar al descanso.

En la reanudación, ambos equipos parecieron saltar al terreno de juego con pocas ideas y el balón deambuló de un lado a otro sin mucho sentido ofensivo, tan sólo alguna acción individual aportó algo en el bagaje ofensivo del ambos conjuntos.

Forlán despertó el partido de su sopor, al desperdiciar una inmejorable ocasión para marcar, tras una gran jugada de Jose Mari Romero.

El Villarreal apretó las tuercas al Real Madrid durante algunos minutos, aunque los de Juan Ramón López Caro lograron rehacerse e imponer de nuevo el ritmo que más le convenía: mantener el mayor tiempo posible la posesión del balón, sabedores de lo que sufren los castellonenses cuando no lo tienen.

Ante la nulidad ofensiva mostrada por su equipo López Caro dio entrada a Soldado y el canterano, en su primer balón, a punto estuvo de marcar, aunque lo evitó el meta uruguayo Sebastián Viera.

En los últimos minutos ambos equipos mostraron su predisposición para buscar la victoria, aunque de nuevo cayeron en el juego deslucido y deslavazado que, irremisiblemente, les llevó al empate final sin goles.