El protagonismo y la magia del escolta Kobe Bryant lo convirtieron en una máquina anotadora y al encestar 62 puntos no sólo dio la victoria a los Lakers de Los Angeles sino que estableció varias marcas en la NBA.

Los Lakers se vieron beneficiados con la calidad individual de Bryant y la pésima defensa de los Mavericks de Dallas, a los que vencieron por paliza de 112-90.

Bryant, de 27 años, hizo historia en los anales de la NBA, al encestar 15 puntos en el primer periodo, 17 en el segundo, y 30 en el tercero -esta última es una marca de franquicia, después de haber superado los 24 que compartía con los integrantes del Salón de la Fama Jerry West y Elgin Baylor.

El base encestó 18 de 31 tiros de campo, incluyendo 4 de 10 de tres puntos y 22 de 25 desde la línea de personal, en 33 minutos.

Kobe estuvo cerca de igualar los números de George Gervin, de los Spurs de San Antonio, que en 1978 anotó 33 puntos en un cuarto; David Thompson, de los Nuggets de Denver, logró 32 ese mismo año, y el legendario Wilt Chamberlain, 31 para los Sixers de Philadelphia en 1962.

La puntuación de Bryant es la sexta más alta en la historia del equipo y la mayor para los Lakers desde que Chamberlain anotó 66 el 9 de febrero de 1969.

Bryant se convirtió en el primer jugador de la NBA en alcanzar los 60 puntos desde que lo lograra Allen Iverson, de los Sixers de Philadelphia en febrero pasado.

El escolta estrella de los Lakers también superó la barrera de los 50 puntos por sexta ocasión en su carrera y por primera vez desde el 28 de marzo del 2003, cuando su equipo se enfrentó a los Wizards de Washington.

En el último periodo, los 18.997 asistentes pedían a gritos que Kobe continuara jugando, pero con una victoria que en el tercer periodo era clara, el entrenador Phil Jackson decidió no meterlo más al campo de juego para no arriesgarse con una lesión ni tampoco dejar más en evidencia la mala defensa del equipo rival.