El Manchester United quedó eliminado de la UEFA Champions League al perder contra el Benfica por 2-1, que remontó un tempranero gol de Paul Scholes y se clasificó como segundo del Grupo D, por detrás del Villarreal.

Cuando había espectadores buscando su asiento, el lateral Neville apareció en la línea de fondo, pasó cómodamente al segundo palo, donde Scholes golpeó en semifallo el balón, que suavemente entró en la portería del Benfica, ante la mirada atónita del guardameta Quim, que comprendía cómo el conjunto inglés se pudo adelantar tan fácilmente.

Tras este despiste, el Benfica se serenó y perdió el respeto al rival y se lanzó al ataque, sabedor de que sólo le valía una victoria, y en el minuto 16 el brasileño Geovanni puso el empate en el marcador, con un gol de plancha a pase desde la banda de su compatriota Nelson.

Tras este movido inicio de partido, los dos equipos bajaron ligeramente el pistón, pues el miedo a cometer otro error defensivo y complicarse la vida era mayor a sus ansias de marcar el segundo.

Pero el desequilibrio en el luminoso llegó en el minuto 34, cuando el brasileño Beto disparó desde la frontal con tal fuerza que Van der Sar apenas tuvo tiempo a reaccionar y ver cómo el balón entraba por segunda ocasión en su arco.

El partido podría haber quedado sentenciado en un contraataque del Benfica, en el que Geovanni cayó en el área inglesa cuando se disponía a rematar a puerta, pero el árbitro le ordenó levantarse y que continuase el encuentro.

Manchester apenas creó oportunidades, quitando el error de la defensa lusa que significó su primer gol y una gran bolea de Scoles, que Quim desvió a saque de esquina cuando se encaminaba a la red.

Tras el descanso, el conjunto inglés adelantó las líneas y aumentó la presión sobre la salida de la pelota, buscando complicar el fútbol local. El trabajo funcionó y la primera oportunidad llegó en el 57, cuando Van Nistelrooy recibió de espaldas en el área, abrió el balón a la derecha, desde donde Cristiano Ronaldo disparó cruzado, aunque demasiado para que el balón tomase camino de puerta.

El Manchester no tenía mucho tiempo para levantar el partido y el técnico inglés, Alex Ferguson, sacó a un punta más, al delantero francés Saha, para aumentar la presión en ataque.

La modificación táctica dio más poderío y dominio del partido a los visitantes, en buena medida porque el Benfica se olvidó de que tenía centrocampistas y hacia rápidas transiciones para intentar sorprender a una exigua defensa inglesa.

Sin embargo, el conjunto lisboeta no tuvo la sangre fría para matar al Manchester United en las varias ocasiones de las que dispuso, aunque logró su objetivo: el pase a los octavos de final de la Champions League.

SÍNTESIS DEL PARTIDO:

BENFICA (2): Quim; Alcides, Luisao, Anderson, Leo (Rocha, min. 89); Nelson, Nuno Asis (Pereira, min. 71), Petit, Beto, Geovanni (Mantorras, min. 80) y Nuno Gomes.

MANCHESTER UNITED (1): Van der Sar; Neville, Ferdinand, Silvestre, O'Shea (Richardson, min. 84); Giggs (Saha, min. 60), Scholes, Smith, Cristiano Ronaldo (Park, min. 66); Rooney y Van Nistelrooy.

GOLES: 0-1: Scholes (min. 5); 1-1: Geovanni (min.15) y 2-1: Beto (min. 34).

ÁRBITRO: Kyros Vassaras (GRE) sacó tarjeta amarilla a Beto (min. 17), Cristiano Ronaldo (min 22), Geovanni (min. 43), Petit (min. 64), Neville (min. 85) y Ferdinand (min. 90).

ESTADIO: La Luz, ante 65.0000 espectadores.