Con un arranque demoledor (a los cinco minutos ya estaba dos goles arriba), Independiente goleó por un contundente 4-0 a Olimpo de Bahía Blanca y mantiene su gran ilusión de luchar por el título a dos fechas del final del torneo Apertura. Los goles del rojo fueron convertidos por Lucas Pusineri, Eduardo Domínguez y Sergio Agüero, el juvenil de penal, en la primera etapa, y Eduardo Bustos Montoya, en la segunda. Olimpo terminó con uno menos por expulsión de su volante de creación Leandro Benítez, a los 11 minutos del complemento.

El equipo de Julio Fancioni resultó muy superior para la formación bahiense, facturó de entrada y con dos goles de ventaja manejó los mejores tiempos del partido. El cotejo fue jugado bajo una altísima temperatura, la que determinó por parte del árbitro Daniel Giménez dos suspensiones, una en cada etapa, para que los futbolistas se refrescaran. Se habían disputado tres minutos cuando Pusineri apareció muy solo por la derecha para meter un frentazo espectacular que descolocó al arquero Carlos Roa y se coló junto a un palo. Pasaron dos minutos y Domínguez ejecutó muy bien un tiro libre cerca del área rival para meter un zurdazo bajo que Roa no logró contener. Con todo el desarrollo a su favor, Independiente siguió prevaleciendo por actitud y por las facilidades que le otorgaba el rival.

Sobre el minuto 15, Roa con una mano alcanzó a desviar al córner un preciso disparo de Bustos Montoya. Pareció reaccionar Olimpo cuando a los 20 el uruguayo Hugo Costela se fue por la derecha, envió un centro hacia atrás y Lucs Biglia en su afán por rechazar hizo rebotar la pelota en el palo izquierdo del arquero Oscar Ustari, pero fue nada más que una insinuación. Un minuto más tarde, en una contra precisa, Pusineri bajó con pasmosa tranquilidad una pelota por la derecha. Tras el enganche (con sombrero incluído a un rival) y el posterior zurdazo la pelota pegó en la base del palo derecho de Roa y luego recorrió toda la línea del arco para irse afuera por el otro costado. Siguió muy tranquilo Independiente hasta que en el minuto final de la primera etapa Agüero encaró entre Jorge Martínez y Javier Páez, el rebote le quedó para Bustos Montoya y Martín Wagner terminó cometiéndole una infracción al delantero rojo.

El tiro penal fue ejecutado por Agüero para estirar las cifras y para frenar cualquier intento bahiense. El complemento no trajo nada nuevo, salvo que a los 11 minutos el árbitro Giménez entendió que el enganche Benítez lo insultó y le sacó la tarjeta roja. Con uno menos, el equipo de Omar Labruna se limitó a cuidar la pelota cuando podía tenerla en su poder, pero Independiente en cada incursión cerca de Roa dejaba la sensación de que estaba muy cerca del cuarto. El que llegó a los 25, después de una hermosa jugada de contra encabezada por Agüero, quien alargó por la derecha para Pusineri y el centro atrás fue muy bien aprovechado por Bustos Montoya el que definió con una sutileza clavándola junto al palo derecho de Roa. Independiente dispuso de oportunidades para aumentar en un par de situaciones más, pero ya estaba todo definido para los de Avellaneda que no se rinden y siguen con su ilusión intacta.