Chelsea, estimulado por el tempranero gol del atacante argentino Hernán Crespo, cerró su pase a los octavos de final de la UEFA Champions League, tras batir al Anderlecht belga, que sigue sin ser capaz de desligarse de las penurias que ha padecido en la competición continental.

El conjunto inglés, que mantiene intactas todas sus aspiraciones, incluida la de ser primero de su grupo, objetivo que se jugará en Londres ante el Liverpool en la última jornada, no desperdició las limitaciones de su adversario, que todavía no ha sumado punto alguno en el torneo. Es más, el legendario cuadro belga no ha marcado un sólo gol en la UEFA Champions League.

Todo se puso de cara al conjunto de José Mourinho. Salió en tromba. Y después de varias amenazas a la meta de Proto encontró el acierto por medio del argentino Hernán Crespo. Metido en el área, su hábitat natural, exprimió un centro de Frank Lampard para subrayar su puntería y allanar el triunfo del once londinense.

No reaccionó el Anderlecht, permanentemente desdibujado. Endeble y falto de convicción. Seis minutos después, y de nuevo con Crespo como protagonista, fue el central Ricardo Carvalho el que no desperdició la asistencia del ariete sudamericano para batir de nuevo a Proto.

Se trabó el duelo a partir de ese momento. Una vez que el Chelsea apuntaló su objetivo. Un par de ocasiones, por medio de Joe Cole y Duff, alertaron más la meta local antes del descanso.

Con el objetivo cumplido el Chelsea prefirió no apretar excesivamente el acelerador. No estaba tampoco el Anderlecht, marginado de cualquier opción, para protagonizar hombrada alguna. Sin grandes aspavientos el equipo de Mourinho mantuvo el control y el dominio. Especialmente con intentos por las bandas, subidas laterales como las de Gallas y las de Asier del Horno.

El fútbol se hizo espeso. Y las amenazas al área sólo procedieron de balones altos. Al bulto y con los metas como destinatarios. Un disparo de Iachtchouk, entrado al partido tras el descanso, fue el único argumento local.

Pero no tuvo consecuencias. Igual que el disparo de Lampard a falta de un cuarto de hora, que se marchó fuera, o la de Crespo, en la recta final de un duelo.

La renta del Chelsea, sin embargo, pudo ser mayor si el tiro del capitán inglés, Lampard, no es repelido por el palo.