Ajax consiguió un importante triunfo 2-1 frente al Sparta de Praga.
El Ajax consiguió un importante triunfo frente al Sparta de Praga, fraguado en la segunda parte, gracias a la entrada de De Jong, que marcó por partida doble y metió a su equipo en la siguiente fase de la Champions League.
Después de los primeros compases de tanteo entre los dos equipos, los locales tomaron la iniciativa del juego y comenzaron a acercarse a las inmediaciones de la portería checa, con una clara oportunidad de Vermaelen que no supo finalizar.
El transcurso de los minutos intensificó el dominio del equipo de Danni Blind, que monopolizaba la posesión del esférico y llegaba con frecuencia a las inmediaciones del área del Sparta, mientras que los checos se limitaban a intentar jugar al contragolpe aprovechando los huecos que dejaba atrás el Ajax.
Las imprecisiones comenzaron a hacer presencia en el césped del Amsterdam Arena según se acercaba el descanso, y fue el Sparta el conjunto que se aprovechó de esta tónica de desacierto, por medio de Zelenka que llevó peligro a la meta defendida por Stekelenburg.
La reanudación trajo nuevos bríos al equipo de Amsterdam, y en pocos minutos se fueron sucedieron las oportunidades sobre la puerta de Blazek: primero el medio Sneijder, después el sudafricano Pienaar y finalmente De Jong, recién entrado al terreno de juego, pudieron abrir el marcador.
Precisamente fue Nigel De Jong, tras saque de falta de Sneijder, el encargado de romper la resistencia del conjunto centroeuropeo, con un tanto en el minuto 68 que prácticamente ponía a su equipo en los octavos de final de la máxima competición europea.
El gol espoleó al equipo de Praga, que intentó responder con un mayor juego ofensivo, y de esa forma apurar sus opciones de intentar conseguir el tercer puesto de grupo y jugar la Copa de la UEFA, lo que convirtió el encuentro en una ida y vuelta constante hasta que de nuevo De Jong sentenció en el minuto 89.
El gol del defensa eslovaco Petrás en el minuto siguiente solo sirvió para maquillar el resultado, ya que no hubo tiempo para que peligrara la victoria local del Ajax.