Ayer (jueves), Miami Heat se coronó como campeón de la NBA tras derrotar en la final a Oklahoma City Thunder por el marcador de 121 a 106. En este compromiso decisivo el monarca tuvo como principal figura a Lebron James.
James realizó una gran labor concretando 26 puntos y asistiendo a varios de sus compañeros en jugadas decisivas. Esto en contrapeso de la pasada temporada donde Lebron tuvo una floja actuación.
Recordemos que en el balance global el campeón obtuvo 4 victorias frente a 1 de su antagonista, incluso llegando a perder el primer encuentro, de ahí en adelante el éxito se hizo presente en las arcas del Heat.