Giovani abandona el Barça entre incomprensión y silbidos para incorporarse al Tottenham.
El mexicano Giovani dos Santos Ramírez
(Monterrey, 1989) ha puesto punto y final a su corto periplo en el
FC Barcelona y su adiós ha resultado un duro golpe moral para el
jugador, debido a que nunca conectó con el público del Camp Nou.
El Barcelona le dio la oportunidad de formarle y permitirle el salto a una de las Ligas más importantes del mundo pero también le ha abierto la puerta de salida cuando no había tenido tiempo de poder explotar como futbolista.
A pesar de su juventud y de su garra, Giovani no contó con el beneplácito de los aficionados barcelonistas, lo que llevó a que se produjesen situaciones incomprensibles, como cuando el mexicano llegó a ser silbado. Los rumores de una vida algo desordenada no han ayudado a formase del Giovani una imagen angelical como la que acompaña a su colega de promoción, Bojan Krikic.
Incomprendido y silbado, Giovani recoge sus enseres del FC Barcelona y se dirige a un fútbol completamente diferente, como es el inglés, y a una entidad que poco o nada tiene que ver con la dimensión del Barça, como es el Tottenham Hotspur FC.
El negocio ha sido bueno para el Barça, porque un jugador de la cantera le reportará 6 millones de euros, más la posibilidad de facturar 5 más en función de los partidos que juegue, además de reservarse un 20% en el caso de que el norteamericano vuelva a ser traspasado a un tercero.
Pero el Barcelona pierde un jugador con una gran proyección que entre muchos obstáculos para triunfar en su primer año con el primer equipo se topó con la oportunidad que también gozó un futbolista de su quinta, como es el catalán Bojan Krikc.
Sin duda, la sombra de Krikic no ha beneficiado en nada a Giovanni, a pesar de que en una fase inicial del campeonato el ya ex entrenador del Barcelona, Frank Rijkaard, apostó más por el mexicano que no por el carácter goleador de Bojan.
Sin embargo, y a pesar de haber sido el séptimo jugador que más partidos, que no minutos, ha jugado este año en la Liga con el Barça (tres goles en total), Giovanni al final acabó siendo un recurso de últimos minutos en los que el joven mexicano jugaba más desesperado que concentrado.
Giovani, un jugador técnico y con buen disparo con la zurda, acabó también con la paciencia del banquillo barcelonista, por no ajustarse al fútbol que se le proponía, el de correr la banda, en lugar de romper al centro e intentar los regates imposibles y esláloms que sólo parecían reservados a Lionel Messi.
De todas formas, sus últimos minutos en el Barça fueron para olvidar, especialmente en el Camp Nou, donde en este último tramo de campeonato los ánimos estaban muy descontrolados. No fue ni la primera ni segunda vez que un regate en exceso o un mal pase del joven acababa con silbidos desde el graderío, donde sólo existía paciencia para Bojan.
Giovani dos Santos, que el pasado 11 de mayo cumplió 19 años, decidió aguantar hasta el último instante del campeonato para someterse a una operación de tobillo. Su compromiso, ante el numeroso grupo de compañeros de baja, no tuvo recompensa y, así, el norteamericano ha sido desestimado para el nuevo proyecto que el año que viene dirigirá Pep Guardiola. EFE
El Barcelona le dio la oportunidad de formarle y permitirle el salto a una de las Ligas más importantes del mundo pero también le ha abierto la puerta de salida cuando no había tenido tiempo de poder explotar como futbolista.
A pesar de su juventud y de su garra, Giovani no contó con el beneplácito de los aficionados barcelonistas, lo que llevó a que se produjesen situaciones incomprensibles, como cuando el mexicano llegó a ser silbado. Los rumores de una vida algo desordenada no han ayudado a formase del Giovani una imagen angelical como la que acompaña a su colega de promoción, Bojan Krikic.
Incomprendido y silbado, Giovani recoge sus enseres del FC Barcelona y se dirige a un fútbol completamente diferente, como es el inglés, y a una entidad que poco o nada tiene que ver con la dimensión del Barça, como es el Tottenham Hotspur FC.
El negocio ha sido bueno para el Barça, porque un jugador de la cantera le reportará 6 millones de euros, más la posibilidad de facturar 5 más en función de los partidos que juegue, además de reservarse un 20% en el caso de que el norteamericano vuelva a ser traspasado a un tercero.
Pero el Barcelona pierde un jugador con una gran proyección que entre muchos obstáculos para triunfar en su primer año con el primer equipo se topó con la oportunidad que también gozó un futbolista de su quinta, como es el catalán Bojan Krikc.
Sin duda, la sombra de Krikic no ha beneficiado en nada a Giovanni, a pesar de que en una fase inicial del campeonato el ya ex entrenador del Barcelona, Frank Rijkaard, apostó más por el mexicano que no por el carácter goleador de Bojan.
Sin embargo, y a pesar de haber sido el séptimo jugador que más partidos, que no minutos, ha jugado este año en la Liga con el Barça (tres goles en total), Giovanni al final acabó siendo un recurso de últimos minutos en los que el joven mexicano jugaba más desesperado que concentrado.
Giovani, un jugador técnico y con buen disparo con la zurda, acabó también con la paciencia del banquillo barcelonista, por no ajustarse al fútbol que se le proponía, el de correr la banda, en lugar de romper al centro e intentar los regates imposibles y esláloms que sólo parecían reservados a Lionel Messi.
De todas formas, sus últimos minutos en el Barça fueron para olvidar, especialmente en el Camp Nou, donde en este último tramo de campeonato los ánimos estaban muy descontrolados. No fue ni la primera ni segunda vez que un regate en exceso o un mal pase del joven acababa con silbidos desde el graderío, donde sólo existía paciencia para Bojan.
Giovani dos Santos, que el pasado 11 de mayo cumplió 19 años, decidió aguantar hasta el último instante del campeonato para someterse a una operación de tobillo. Su compromiso, ante el numeroso grupo de compañeros de baja, no tuvo recompensa y, así, el norteamericano ha sido desestimado para el nuevo proyecto que el año que viene dirigirá Pep Guardiola. EFE