Por tercera vez consecutiva, Rafael Nadal celebró su cumpleaños en Roland Garros, donde también festejó su victoria en cuartos de final frente a Nicolás Almagro y donde recibió un regalo y una tarta de los organizadores.

El mallorquín recibió un cuadro pintado por la francesa Frederique Lorain, una admiradora del tenista que lo pintó para él.

Residente en la ciudad belga de Amberes, Lorain confesó haberse sentido muy atraída por "el carisma, la fuerza y la pasión" de Nadal en la pista, lo que le inspiró en su trabajo.

"Viajé hasta el Abierto de Estados Unidos para mostrarle una foto del cuadro. A los pocos meses, su representante me llamó y me dijo que le había gustado mucho y que quería comprarlo. Yo le dije que más que dinero me gustaría regalárselo en un acto público, para darme publicidad, porque no es fácil abrirse camino en el mundo del arte aunque tengas talento", dijo.

Pronto apareció la oportunidad de entregárselo en París y, en particular, el día de su cumpleaños y Lorain enseguida accedió.

"Estoy entusiasmada de la forma en la que se han hecho las cosas, me parece que ha sido un acto muy generoso", dijo.

La pintora aseguró que Rafa es su jugador favorito, aunque no ocultó sentirse también atraída por la elegancia del suizo Roger Federer.

"Me cautivó esa mirada que te atraviesa y la fuerza que desprende en el campo. Me inspira, porque eso es lo que yo trato de hacer en mi trabajo, ser la mejor en cada cosa que hago, hacer del arte algo sublime", indicó.

Antes de recibir el regalo, Nadal analizó el partido contra Almagro, del que dijo que fue "el mejor" que jugó hasta ahora en el torneo.

En cuanto al hecho de no haber cedido ningún set en lo que va de torneo, Nadal indicó que eso tiene una doble lectura: "te permite estar más descansado, por un lado, pero también la tensión a veces puede ayudarte".

Sobre su próximo rival, el serbio Novak Djokovic, Nadal aseguró que será "un partido difícil", destacó que ambos han completado buenos torneos sobre tierra batida y que "puede pasar cualquier cosa".

"Tendré que jugar al cien por cien, si no será muy difícil. Somos dos jugadores acostumbrados a este tipo de partidos", comentó.

Negó que el serbio sea un jugador de pista rápida, aunque reconoció que prefiere enfrentarse a él sobre la tierra batida. "Estuvo cerca de ganarme en Hamburgo y yo le he ganado en pista rápida. Es un jugador grandioso en tierra", afirmó. EFE