La noticia salió del periódico digital español El Mundo, que en una crónica de las mujeres del aún presidente de FIFA, Joseph Blatter, menciona a la famosa modelo rusa, Irina Shayk, ex novia de Cristiano Ronaldo, como una modelo con la que Blatter habría tenido una relación romántica. A continuación la nota:
"Mi amante es la FIFA y mi familia es el fútbol", solía decir Sepp Blatter (79) cuando los periodistas le preguntaban por su vida privada. En la inauguración del congreso de la FIFA, el pasado jueves, no hacían falta preguntas. Bastaba con echar un vistazo a su novia, Linda Barras, suiza de origen armenio y 28 años más joven que él, a su lado en todo instante. A sus 51 años, la que había conocido como una amiga de su sobrina, vestía de rojo pasión y con un desenfadado corto de falda. Todos sabían de esta última conquista de Sepp desde enero de 2014, cuando Blatter se presentó con ella en la gala de entrega del Balón de Oro y se sentó entre él y Pelé. No paraban de hacerse arrumacos y el futbolista incluso llegó a llamarles cariñosamente la atención.
Sólo unos días después, el todavía marido de Linda, el empresario del sector inmobiliario y también suizo Christian Barras, hizo saber a través de su abogado que estaban separados desde hacía un tiempo. Desde entonces Linda le acompañaba en casi todos los eventos, aunque Blatter no ha sentido la tentación de abandonar la soltería. Un conocido de ambos ha comentado en Zúrich que se conocieron en la gala "Nuit des Neiges", de la que Linda era presidenta y que fue un flechazo irresistible.
Antes de Linda, madre de dos hijos, la chica de Blatter era la modelo Irina Shayk, y antes aún la polaca Ilona Boguska, que llegó después de tres matrimonios y múltiples aventuras para quedarse a su lado durante una década. Su última boda, con la entrenadora de delfines Graziella Bianca, tuvo lugar en 2004 y el matrimonio no llegó a durar un año. "Su éxito con las mujeres tiene que ver con que es un tipo encantador, que sabe cómo acercarse y sabe calcular. Siempre está haciendo chistes que a menudo entiende solamente él y creo que se trata de una táctica para probar a su interlocutor. Pero cuando se trata de mujeres, no busca exactamente mentes brillantes. Le interesa sobre todo el brillo", comenta Bruno Affentranger, editor y periodista, autor del libro "Sepp, el rey del mundo del fútbol".
Pero por encima de sus innumerables líos, la mujer de su vida es sin duda Corinne, su única hija y fruto de su primer matrimonio con Liliane Biner, que actualmente trabaja como profesora de inglés y es propietaria junto con su marido, de un restaurante en el pueblo natal de Blatter, Visp. "Nadie está libre de culpa, pero (...) no es él quien toma el dinero", ha defendido a su padre tras el escándalo, asegurando que es víctima de una conspiración. "Yo no diría que de los estadounidenses y de los británicos, pero ciertamente de gente urdiendo entre bastidores", ha apuntado.
Tomado de: El Mundo