Algunas de las familias afectadas por la normativa de la FIFA que impide que clubes contraten a jugadores menores de edad, llevarán a los tribunales al organismo internacional, después de que sus hijos hayan tenido que abandonar la Masía, el centro de formación del FC Barcelona.
Según una información que ha dado a conocer esta tarde Radio Barcelona, la denuncia tiene que ver con la normativa a partir de la cual el Barça ha sido sancionado con dos periodos sin poder fichar jugadores, y que ha llevado al club catalán a desmantelar de jugadores extranjeros su centro de formación.
La emisora barcelonesa subraya que uno de los padres de un jugador afectado, Dani Lederman, ha iniciado acciones desde los Estados Unidos para llevar a la FIFA a los tribunales ordinarios para denunciar una normativa que considera "injusta" y que atenta "contra los derechos humanos".
Además, esta denuncia estaría respaldada por otras familias afectadas por la misma situación, incluso en otros equipos, y que todas ellas serían asistidas por abogados americanos.
La FIFA implantó una normativa hace años para proteger a los más jóvenes del mercadeo internacional y no tuvo en consideración ningún tipo de especificidad que estuviese en el margen, como la Masía del FC Barcelona, institución que el propio organismo ha ensalzado y aplaudido como modelo para seguir.
Por ello, y después de haber sido advertido el Barcelona en diferentes ocasiones de que estaba contraviniendo la norma, la FIFA castigó al club con un año sin poder fichar, consecuencias que aún arrastra, hasta el punto de que incluso en una situación de crisis como ha sido la grave lesión de Rafinha Alcántara, quien estará más de seis meses de baja, el club catalán no podrá cubrir su ficha con otro jugador, que sí que hubiese podido proceder en caso de encontrarse sin sanción.
Dani Lederman es padre del joven Ben, quien ya fuera de la Masía está jugando en Florida. Ben fue uno de los últimos canteranos que salió del centro de formación, aunque antes de que hace unos días la FIFA volviese a dar un listado al Barça de jugadores que tenían que salir de la institución, hasta un total de once.
La FIFA no ha tenido en consideración la situación familiar de ninguno de los jugadores, ni si llevan implantados en España desde hace años, ya que simplemente se ha limitado a aplicar la norma sin atender los casos especiales.
En la última lista de bajas presentada por la FIFA para que el Barcelona la ejecutase, se encuentra un caso curioso, como hace días desveló Mundo Deportivo, el caso del joven Labinot Kabashi, del cadete A.
Se trata de un jugador nacido el 28 de febrero del 2000 en Skënderaj, una población norteña de Kosovo, habitada en su totalidad por albaneses, y una de las más castigadas del país, donde la guerra se ensañó especialmente con la población civil.
La migración masiva de personas llevó a los Kabashi a España, donde el niño jugó en el Sallent y el Gimnàstic de Manresa, del centro de la provincia de Barcelona, antes de fichar por el Barça, pero ahora ha quedado inhabilitado para jugar con el conjunto azulgrana por la normativa de la FIFA, que impide que menores de edad pertenezcan a clubes fuera de sus países.
EFE
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