Inglaterra superó su primer escollo de la Eurocopa-2020 al vencer por la mínima (1-0) a Croacia, vigente finalista del Mundial, en el primer partido del grupo D, este domingo ante su público en Wembley.
El extremo del Manchester City Raheem Sterling fue el autor de la única diana del partido (57), aprovechando un buen servicio del centrocampista del Leeds Kalvin Phillips.
La décima fue la buena para los ingleses, que hasta este domingo nunca habían ganado en su estreno en una Eurocopa.
A los dirigidos por Gareth Southgate les costó imponer en el marcador el dominio que estaban mostrando sobre el césped frente a una decepcionante Croacia, hasta que apareció Sterling para poner a los 'Three Lions' por delante en la segunda parte en el soleado Wembley.
"Siempre dije que si jugaba en Wembley en una gran competición, marcaría", declaró el atacante. "Tenía que marcar en mi jardín, estoy feliz por haberlo conseguido", añadió.
El primer gol del futbolista de 26 años en un gran torneo internacional -era su 13º partido- fue la respuesta perfecta a los que criticaban que Southgate le pusiera en el once inicial por delante de Jack Grealish.
"¿Si la he justificado (su titularidad)? Lo intento. Ha sido una temporada larga para mí, estaba deseando estar aquí y comenzar a jugar con Inglaterra, sabía que iba a ser una experiencia positiva", desveló.
- Abucheos minoritarios -
Sterling mantiene una complicada relación con los aficionados de Inglaterra después de ser criticado por su mal rendimiento en la Eurocopa-2016.
"Estoy feliz por él porque hacía unos partidos que no había marcado antes de hoy", dijo Southgate sobre Sterling.
En la reválida de la semifinal del Mundial-2018 que acabó llevándose Croacia, Inglaterra lamentó su falta de acierto este domingo hasta que Sterling acudió al rescate.
El tanto del jugador 'citizen' alivió la tensión en Wembley y dio inicio a los cánticos "Football's coming home" (el fútbol viene a casa) en la grada.
Existía el miedo de que parte del público silbara a los jugadores cuando pusieran una rodilla en el césped antes del partido como gesto de apoyo al movimiento Black Lives Matter contra el racismo, como sucedió en los precedentes amistosos frente a Austria y Rumanía.
Pero pese a que hubo abucheos desde algunos sectores de una grada ocupada por 22.500 espectadores, la mayoría aplaudió el gesto en esta ocasión.
Los ingleses no firmaron una actuación estelar, pero Southgate puede estar contento con la manera en que su equipo supo mantener la compostura en los momentos de tensión, hasta que puso el duelo a su favor.
"Ahora es nuestro gran reto", contestó el seleccionador inglés cuando fue preguntado sobre si el triunfo de este domingo podía desatar la euforia.
"Evidentemente estamos felices por la victorias. Pero una de las cosas más duras del deporte es volver a la posición en la que estabas antes del pitido inicial", analizó. "Podemos tener un poco de euforia, debemos asegurarnos de estar listos para lo que será un partido increíble ante Escocia", cerró.
"Felicitaciones a mis jugadores, que lo han dado todo", dijo Zlatko Dalic, seleccionador croata, en rueda de prensa. "Sabíamos que nos enfrentaríamos a una gran presión y no hemos resistido mal, casi hemos logrado tomar el control del partido".
"Tenemos derecho a ser optimistas para intentar lograr nuestro objetivo: clasificarnos para la siguiente ronda", añadió.
Inglaterra se medirá a Escocia el viernes en su segundo encuentro de la llave D antes de afrontar su último partido de grupos contra República Checa el 22 de junio. AGENCIAS