Desde el inicio del partido la selección del Ecuador salió con el afán de hacer daño y sin rodeos y sin un estudio del rival, los dirigidos por el profesor Reinaldo rueda intentaban hacer daño a la meta rival. En el saque inicial los pases a profundidad a la banda derecha se hicieron notar, no buscando a Antonio Valencia, sino más bien buscando la llegada del ariete Felipe Caicedo.
Los primeros minutos de compromiso eran de total dominio de los tricolores porque sabían como penetrar el área de la selección europea. Pasados los cinco minutos los mediocampos, Montero y Valencia estaban bien marcados y cada vez que se intentaba desbordar como es costumbre de estos elementos, dos marcas a cada uno les impedían llegar con claridad y con las constancia a la que acostumbran en sus clubes y con la selección; esto limitaba las llegadas claras de los ecuatorianos.
La selección de Suiza se crecía en el campo de juego porque ya sabía la debilidad de Ecuador en el campo de juego, la líneas defensiva en su parte derecha no era tan eficaz y el juego europeo aprovechaba esos agujeros que se dejaban. El desborde por esa banda por parte de los suizos intentaba hacerse diagonal y ahí la buena actuación de Gruezo no dejaba que el fútbol helvético prosiga.
Al cuarto de hora de juego, el partido estaba casi emparejado, pero con una pequeña supremacía suiza, Montero ya encontraba el camino para escaparse de su doble marca y asustaba cuando avanzaba hasta la última línea enemiga, así como nos tiene acostumbrados. Noboa también tiene mucho mérito en el primer tiempo jugado por el medio sector, generando fútbol y tapando por esa parte las llegadas de Behrami.
Corridos ya 20 minutos de juego, Montero logró escaparse por su banda, hasta la uúltima línea, y el defensor Lichtsteiner hizo caer al buen elemento ecuatoriano y para la jugada el juez central decretó un tiro libre que parecía un tiro de esquina de corta distancia. El encargado de centrar seria el zurdo Walter Ayoví, quien con gran calidad a pelota quieta puso una pelota a la cabeza de Enner Valencia que se elevaba solo en el área chica del portero suizo para marcar el primer y único tanto que ponía a ganar a la tricolor.
Con un gol arriba en el marcador a favor de los ecuatorianos, el balón pasó a total dominio de Suiza, la selección nacional se limitaba a defenderse con todos sus hombres en área para frenar la envestida de la selección uniformada de rojo.
Para el segundo tiempo, los primeros minutos fueron de total dominio suizo, por todos los sectores, la defensa tricolor tuvo un esfuerzo sobrenatural y con concentración ya que los ataques eran profundos, apenas corrían dos minutos de la parte complementaria un tiro de esquina emulaba lo que fue el gol de Ecuador, un cabezazo casi en el mismo lugar donde marcó Enner Valencia, Mehmedi la conectó de cabeza y puso el empate.
Ecuador solo generaba fútbol por la banda izquierda en los pies de Montero que hacía lo típico, desbordar por su posición y centrar en la última línea, pero nadie llegaba a terminar la jugada e inflar las redes rivales.
Pese a los ataques intensos y las ligeras llegadas ecuatorianas sobre el área rival, el empate se hacía como el resultado definitivo en el estadio Mané Garrincha. Hasta el último minuto de compromiso. En una jugada de contragolpe en la que la defensa ecuatoriana regresaba a sus posiciones de una manera lenta y desordenada, los jugadores Suiza supieron aprovecharlo y Seferovic que había entrado al cambio puso el dos a uno. El desconcierto era evidente, los hinchas y jugadores no se podían creer lo que había pasado y la selección quedó con las manos vacías en su primer partido en la Copa del Mundo de Brasil.
Ecuador jugará su siguiente partido contra Honduras el 20 de este mes en el estadio Pantanal; mientras que Suiza jugará su segundo partido contra Francia el viernes 20 en el estadio Fonte Nova.
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Estos son los jugadores que saltaron al campo de juego:
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