"Mi esposa estaba fastidiada porque pasaba mucho tiempo fuera de la casa". Comenta Wilson Carabalí. Pues el ex seleccionado de Ecuador (1994 y 1996) y bicampeón con Emelec no tenía ni la más mínima intención de retirarse del fútbol con 40 años jugaba en el Orense S.C. club de la ciudad de Machala.
El defensor tenía 2 pensadas dos opciones para continuar en el fútbol. La primera opción era irse a Estados Unidos, pero la segunda opción terminó por convencerlo, es que las razones que lo inclinaron por la segunda opciones fueron mayores, su cunada y su suegra vivían en Chile, es por lo que se decidió por el campeonato chileno. Además Carabalí tenía 2 hijos uno de 14 y otro de 17 al momento de partir de su país y quería que sus dos hijos siguieran sus pasos.
Al parecer su segunda opción fue la más acertada. Ya que de la mano de sus dos hijos Wilson Jr y Omar, en marzo de 2013 llegaron al Estadio Monumental de Colo Colo y se juntó a Héctor Tapia, que en ese tiempo era técnico de las inferiores, el técnico accedió al pedido de su colega.
A pesar de que Wilson Jr no quedó entre los seleccionada, Omar el menor, con tan sólo 14 años convenció con su estatura para el puesto de arquero. Rápidamente comenzó su adaptación y entrenó en la sub 17.
"En Ecuador no hay un buen trabajo formativo. Fue a Independiente del Valle a probarse y, antes de venirnos a Chile, me di cuenta que no iba a progresar allá. Por la parte deportiva nunca pensé que juegue en Ecuador", comenta Carabalí.
El más chico de los Carabalí se siente muy orgulloso de su padre y es el llamado a seguir con la tradición familiar, que comenzó con Héctor, primo hermano de Wilson y destacado seleccionado ecuatoriano (Copa América 1993, 1995, 1997 y 1999).
Es que con tan sólo 17 años y una estatura de 1,85 metros, ha demostrado todo lo que puede dar. Luego de estar en las categorías menores de Colo Colo desde marzo del año pasado, ahora entrena junto al primer equipo en las categorías menores y es uno de lso cuatro arqueros que están en las prácticas del Estadio Monumental.
"Tiene que aprender de los grandes y no todos tienen el privilegio de compartir con Justo Villar. Yo le digo que aprenda de todo lo que ve, hasta de los más mínimos detalles. Para llegar a ser grande hay que aprender de los grandes", dice muy emocionada Carabalí.
Fuente: Colocolo.cl Elgraficochile.cl