En el Parque de los Príncipes y por el partido de la ida de los octavos de final de la UEFA Champions League, Bayern Munich se impuso por 1-0 ante París Saint-Germain.
El primer tiempo fue completamente favorable al conjunto visitante, que desde el silbatazo inicial asumió la iniciativa, inclinó la cancha a su favor, controló el 57,5% de la posesión de la pelota y no sufrió ningún tipo de sobresalto.
De hecho, el equipo local solo registró un intento de remate en toda la etapa inicial y fue recién sobre el cierre, cuando Lionel Messi ganó un tiro libre en la puerta del área grande, pero luego no pudo superar la barrera en la ejecución del mismo.
Aún así, cabe destacar que el elenco bávaro, pese a su dominio del juego, careció de recursos para generar situaciones netas de gol. Sus chances más claras fueron a partir de tiros desde media distancia (Kingsley Coman, a los 33', y Joshua Kimmich, a los 42').
De todos modos, en el inicio del complemento, a los 53', Alphonso Davies, quien había reemplazado en el entretiempo a João Cancelo, levantó un centro para la llegada de Coman, quien apareció por el segundo palo e hizo cumplir la ley del ex al conectar el envió con un toque de derecha que venció la débil resistencia de Gianluigi Donnarumma.
A los 56', Christophe Galtier apeló al ingreso de Kylian Mbappé, quien regresó a la acción después de dos semanas de inactividad. En la última media hora, el cotejo se tornó más dinámico, incluso por momentos de ida y vuelta, aunque con el Bayern en control.
A los 62', tras una gran acción individual de Jamal Musiala, entre Donnarumma y el palo derecho evitaron el tanto de Eric Choupo-Moting, mientras que a los 64' el italiano se volvió a revolcar para rechazar un cabezazo de Benjamin Pavard.
A los 72', en una de sus mejores ocasión en el encuentro, Mbappé encontró espacio para correr, pero Sommer le tapó el mano a mano, y luego tampoco pudo Neymar en el rebote contra el arquero suizo.
El tramo final del partido le correspondió al PSG, que finalmente se adueñó del balón y asedió al rival con la creatividad de Messi, las proyecciones por derecha de Nuno Mendes y la amenaza dentro del área de Mbappé.
En este contexto, el local creó situaciones claras para convertir, pero no estuvo fino en la definición y, la única que terminó en la red, fue anulada, ya que Mendes había partido en posición adelantada antes de servirle el gol a Kylian.
El Bayern, que quedó bien perfilado para la vuelta del 8 de marzo en el Allianz Arena, finalizó el encuentro con diez hombres por la expulsión de Pavard, que recibió su segunda amarilla en tiempo de descuento por una falta sobre Messi. STATSPERFORM