A través de la magia de la televisión, pude mirar varios de los partidos de las eliminatorias de los países de Sudamérica, al mundial de Brasil 2014 y, dejando a un lado los resultados mismos, he podido observar la actitud de los jugadores durante estos encuentros que, sin ser un psicólogo, me ha llamado mucho la atención pues, solamente desde el campo de esta maravillosa ciencia, se puede tratar – por lo menos -, de entender lo que les ocurre a los jugadores de fútbol en el campo de juego.
Comenzaré por analizar a los jugadores de mi querido país, el Ecuador. Dos partidos esperados por todos, donde demostraron su notable entrega y, sin obnubilarse por lo que pasaba con las figuras de los equipos contrarios, cumplieron, no con el 100% de acuerdo con los resultados pero, si en gran forma. Estar segundos en las eliminatorias, luego de Argentina al término del año, siempre será importante, aunque faltan todavía siete partidos que se jugarán desde marzo del 2013. Pero, el mayor valor alcanzado por los jugadores ecuatorianos se debe, de acuerdo a mi criterio, sin tener un orden táctico en los partidos, sino que, por el contrario, por su propia iniciativa, ya que, nunca terminaron por convencerme, que alguien los dirigía. Como ejemplo, la falta de acompañamiento a Valencia en el partido con Venezuela, haciendo ingresar a quienes podían ayudarlo, cuando el partido terminaba (?) Pero bueno, esperemos que la suerte nunca nos deje y, nos veamos en Brasil el 2014.
Otro partido que realmente me llamó la atención, fue el partido de Uruguay frente a Bolivia en La Paz. Cierto es que perdieron los rioplatenses por 4 goles a 1 pero, quien miró este partido, se pudo dar cuenta de lo que significó para ellos, el miedo a la altura. Comenzaron con un claro temor, que casi no corrían en la cancha, teniendo jugadores de mayor calidad que sus adversarios de turno. Es así que, cuando ya estaban perdiendo, los últimos 20 minutos, se dieron cuenta de que sí podían y, se fueron arriba, hasta conseguir el gol del descuento. Pero, ¿por qué no actuaron así todo el partido? Cierto que la altura afecta físicamente pero, mucho más lo hace la parte psicológica, En cambio Bolivia, gracias a la intervención de Askargorta – su técnico actual -, sin calidad pero, con gran entrega, superaron lo que antes no podían.
El último ejemplo, es Chile. Frente a Ecuador, no jugaron como debían hacerlo, con los jugadores que tiene. La prensa y la afición del país de la Estrella Solitaria culparon al técnico Claudio Borghi y, con mejor actitud los ecuatorianos, le ganaron inobjetablemente. Pero, que pasó frente a Argentina. Cierto que perdieron el partido pero, durante el encuentro, le pasaron por encima a los linajudos rioplatenses. Que no hayan podido concretar goles, en las múltiples oportunidades que tuvieron, mientras que, los argentinos con dos jugadas individuales de sus figuras convirtieron los dos goles que les permitió ganar. Sin embargo, en la cancha fueron mejores.
Creo que estos ejemplos nos sirven para destacar que, la actitud de los jugadores, significa algo realmente importante para el resultado de los encuentros. Cierto que el que hace más goles gana pero, cuando se pierde entregando todo lo que se puede (sudando la camiseta), con actitud, el aficionado siempre lo destacará, ya que, en el deporte: se gana, se empata o se pierde pero, nunca de debe dejar de luchar.