Alex Darío Aguinaga, ex futbolista ecuatoriano y actual DT de la Liga de Loja, concedió una amena entrevista al portal oficial de la CONMEBOL donde ente otras cosas el `Güero´ se refirió a sus inicios, su brillante carrera y sus propósitos como estratega.
En la charla con la web sudamericana, el `10´ se refirió a lo que se mentaliza como entrenador y, por ende, supo explicar su cambio su imagen. El `Maestro´ recibió una conmemoración a manos de Néstor Benítez en nombre del presidente del máximo organismo del continente, Eugenio Figueredo.
A continuación la nota integra:
Alex Aguinaga: “Le agradezco al fútbol todo lo que me ha dado”
Sereno y con el pelo corto "por la imagen del entrenador" Alex Aguinaga dialogó con conmebol.com. Un ejemplo para quienes comienzan en la tan hermosa como difícil carrera de futbolista.
Perdió el pelo pero no las mañas…, las buenas mañas si cabe la figura. Sigue siendo el tipo sencillo, amable, correcto, el mismo que ejerció el fair play a lo largo de su extensa y brillante carrera. Y, en realidad, el pelo no lo perdió sino que decidió cortárselo “por una cuestión de imagen como director técnico”, según su propia explicación.
Alex Aguinaga, un auténtico símbolo del fútbol ecuatoriano, es actualmente técnico de la Universidad de Loja y se lo ve contento en esa función pese a que en un primer momento intentó ser dirigente. “Sí, en verdad yo quise ser dirigente porque quería cambiar algunas cosas, quería hacer cosas que yo creía que se podían hacer para mejorar el fútbol, tenía planes y sueños como dirigente pero lamentablemente no tuve éxito en esa función, especialmente cuando fui al Necaxa que era el club en que yo había jugado en México durante catorce años. A lo mejor el equivocado era yo o a lo mejor no entendieron lo que quise hacer pero lo cierto es que la experiencia no fue buena, hubo algún otro intento pero finalmente me decidí a seguir en el fútbol como técnico y aquí estoy, feliz, es lo que me gusta”.
Se ríe ante la primera pregunta y dice que “sí, la verdad que sí, que ha habido esa duda de si mi apellido llevaba el acento en la i o en la a, de la sílaba na, pero lo correcto es la segundo, al pronunciar se acentúa en la sílaba na”.
- Conmebol.com.: Alex, a los 16 debutaste en la primera división del Deportivo Quito, ¿era común en Ecuador llegar tan rápido?
- Alex Aguinaga: No, al contrario, era muy difícil y a mí se me dio como premio a que había jugado un buen torneo en inferiores…
- C.c.: ¿Te acordás de lo que sentía ese chico de 16 años al enterarse de que iba a jugar en primera?
- A.A.: Solamente recuerdo que me temblaron las piernas desde el momento que lo supe. Y del partido no recuerdo nada, se me nubló todo, entré en el segundo tiempo y no me acuerdo de nada salvo que había caído granizo y la cancha estaba húmeda…
- C.c.: ¿Familia futbolera?
- A.A.: Sí, especialmente mi papá que fue mi gran maestro, él fue jugador amateur y le apasionaba…
- C.c.: ¿Ya usabas el numero 10?
- A.A.: No, los infantiles y juveniles usábamos números altos, así era. Yo comencé con el número 42, después el 36, después usé el 8 y recién después llegué al número 10…
- C.c.: Era una época en que usar la 10 era una responsabilidad, la gente buscaba al 10 de cada equipo…
- A.A.: Así mismo, la 10 no era para cualquiera, el número 10 era el cerebro, el estratega, el jugador distinto y la gente lo miraba mucho…
- C.c.: ¿Y qué 10 era tu ídolo?
- A.A.: Había muchísimos buenos, comenzando por Maradona pero la verdad es que yo siempre admiré Zico, él fue mi ídolo y recién pude conocerlo cuando yo ya tenía 32 años, en su escuela de fútbol en Rio de Janeiro, es un tipo sensacional, una gran persona, ¡y cómo jugaba!. A pesar de mi edad no me dio vergüenza pedirle un autógrafo.
En nombre del Presidente de la CONMEBOL Sr. Eugenio Figueredo, el director de Comunicaciones de la Institución Sr. Néstor Benítez hizo entrega de un obsequio en reconocimiento a la trayectoria del excelente exjugador ecuatoriano, Alex Aguinaga.
- C.c.: ¿Muchas camisetas cambiadas?
- A.A.: No tantas porque lo que ocurría era que aquellos a los que yo admiraba estaban lejos en la cancha y los que me pedían a mí camisetas eran los defensores o los volantes que me marcaban, tengo de Vampetta, Gilberto Silva, Jorginho, unas cuantas. Una anécdota es que una vez cambié camiseta con Ronaldo y otro compañero había cambiado con Rivaldo, otro gran jugador, y el compañero quería la de Ronaldo así que se la di y me quedé con la de Rivaldo
- C.c.: De las ocho copas América, ¿la de Brasil fue la mejor?
- A.A.: Creo que sí, fue una excelente copa, jugué muy bien y fue una copa con grandes jugadores en las demás selecciones, era lindo jugar antes
-C.c.: ¿Eso incluye una crítica al fútbol que se juega hoy?
- A.A.: No es una crítica, es la realidad, hoy se juega con mucha velocidad, mucha intensidad, la preparación física es fundamental y antes había más juego, no era todo tan apurado
- C.c.: Como técnico ¿defendés al número 10?, hay gente que dice que esa clase de jugador ya no tiene lugar
- A.A.: El buen jugador siempre tiene lugar, al menos en mi equipo. Lo que sí quiero es que el 10 participe de todo el juego, que colabore con el equipo, que no se quede quieto esperando la pelota
- C.c.: Como jugabas vos, andando por toda la cancha…
- A.A.: Siempre me gustó jugar así, no me quedaba quieto, trataba de estar en todas partes, de ayudar a mis compañeros, de participar del juego
- C.c.: Volviendo a aquella copa América del Brasil, ¿es cierto que Fabio Capello había ido a buscarte para el Milán pero ya habías firmado para el Necaxa de México?
- A.A.: Es cierto lo de Capello pero yo no había firmado nada, había dado mi palabra y eso para mí era suficiente, me dijeron que todavía podía ir al Milán pero dije que no, el compromiso estaba hecho y yo tenía que cumplirlo.
- C.c.: ¿Te arrepentiste? ¿Te quedó la espina de no haber ido a Europa?
- A.A.: Me hubiera gustado jugar en Europa pero no me arrepentí porque era lo que debía hacer, cumplir con mi palabra, y además pasé 14 años muy lindos en el Necaxa
- C.c.: ¿Es difícil retirarse?
- A.A.: Muy difícil pero uno debe saber cuándo hacerlo, es mejor que te digan que podías seguir antes que te digan que te retires. Yo veía que ya no podía contra los jóvenes, que ya me ganaban físicamente y entonces lo hablé con mi familia y decidí el retiro
- C.c.: ¿Cómo ves al fútbol ecuatoriano hoy?
- A.A.: Muy bien, hemos mejorado en muchos aspectos estamos físicamente fuertes, tenemos personalidad, el 60% de los jugadores está fuera del país en buenos equipos, en fin, es un buen momento.
- C.c: ¿Fue un golpe duro lo del Chucho Benítez?
- A.A.: Muy duro, cuando me lo contaron estábamos yendo a entrenar y yo creí que fue el papá, que también jugó conmigo, para todo Ecuador ha sido difícil asimilar algo así. Y lo más importante es la parte humana, la familia que deja, los chicos, el resto es secundario
- C.c.: ¿Y al fútbol sudamericano en general?
- A.A.: Muy bien, en muy alto nivel tanto de clubes como de selecciones
- C.c.: Admiraste a muchos números 10 en tu época de jugador, hoy, como técnico, ¿admirás a alguno en particular?
- A.A.: En primer lugar a Alex Ferguson, lo que ha hecho en un club como el Manchester es sencillamente extraordinario y también hay otros como Pellegrini, Guardiola, Mourinho, Bielsa, Lapuente, en fin, no he podido verlos trabajar pero los admiro y sigo aprendiendo cada día
- C.c.: Te eligieron el mejor jugador ecuatoriano de la historia…
- A.A.: Son criterios que uno respeta, no podemos olvidarnos de otros jugadores como, por ejemplo, Alberto Spencer, yo solamente intenté dar siempre lo mejor, el máximo rendimiento en todo sentido
- C.c.: ¿Con qué jugadores jugabas de memoria?
- A.A.: Con el “Tin” Delgado, Ivo Bassay, Sergio Vázquez, Ricardo Peláez, y algunos más, yo sabía como se movían y ellos sabían lo que yo iba a hacer
- C.c.: Con tres décadas de fútbol como aval, ¿cuál sería el mensaje para los chicos que empiezan o que a lo mejor están por debutar a los 16 como lo hiciste vos?
- A.A.: Que disfruten del juego, que sean leales con rivales y compañeros, que sean solidarios, que tengan compromiso como profesionales. Lo más lindo del fútbol es que uno deja amigos en todas partes y yo le agradezco al fútbol todo lo que me ha dado como profesional y como persona.
Esta nota fue tomada de conmebol.com.