Los 'Reds' fueron un equipo solvente y mostró toda su categoría para avanzar en la Champions League tras superar una difícil serie. En el Allianz Arena este miércoles, en juego de vuelta de los octavos de final, Bayern Múnich cayó por 1 a 3 ante Liverpool.
En el compromiso de ida hubo empate 0 a 0 y los 'bávaros' se perfilaban como favoritos, pero toda cambió en el segundo encuentro. Pese a tener todo en contra, los dirigidos por Jurgen Klopp lucieron bien y con mayor temple dentro del campo. A los 26 minutos llegó el gol de Sadio Mané, lo que les dio mayor tranquilidad a los ingleses.
Los locales reaccionaron y atacaron con mayor ritmo, pero sin contundencia. Hasta que, a los 39, Joel Matip intentó desviar un remate y metió el baló en su propia meta. Los alemanes tuvieron su mejor momento y estuvieron cerca de lograr la segunda diana. Los visitantes supieron resistir.
En el complemento, a los de Niko Kovac les volvió a faltar claridad en los metros finales. Los 'Reds' supieron aprovechar y en el momento de mayor tensión apareció la figura de su defensor central. Un cabezazo de Virgil van Dijk, a los 69, adelantaba a los visitantes. Esta acción cambió todo el desarrollo del compromiso. Y sobre el final, a los 84, Mané logró su doblete y sentenció la llave.
Liverpool clasifica a cuartos de final y se une a Manchester United, Manchester City y Tottenham como los representantes ingleses en este certamen.