Aucas, actitud diferente ante la adversidad

Enviado por robert el Sáb, 06/08/2016 - 15:15

El haber cambiado la actitud de competencia, el no resignar un centímetro de cancha, con profesionales del fútbol que quieren salir heridos de un campo de batalla, dando todo si, corriendo a 200 kilómetros por hora, luchando en espacios difíciles, ganando en anticipo y poniendo el coraje de ayer, hoy y siempre, es algo que vale la pena subrayar.

Después del dramático empate 1-1 con Deportivo Cuenca en la segunda fecha de la segunda etapa, la realidad de Aucas sigue siendo preocupante bajo la responsabilidad de Tabaré Silva: 10 PJ, 1G, 2PE, 7 perdidos. Con una gran diferencia: la actitud es reconfortante, el cambio es positivo, la resistencia en el fragor de la lucha ha levantado el autoestima del futbolista del equipo más querido de Quito.

Primera conclusión: Por todo lo explicado, el volver al estadio del Aucas con matracas, bombos y sentimientos nobles, será el reencuentro con  un grupo de grandes profesionales que siempre van a la cancha a dejar todo de sí.

La falta de resultados al parecer ha enojado a los hinchas que han dejado de asistir al Gonzalo Pozo Ripalda. Los auténticos seguidores, ganando o perdiendo lo siguen con corazón, devoción y entusiasmo

Segunda conclusión. El mantenerse en la categoría es una prioridad este año, sin descuidar la Copa Sudamericana ante el Real Garsilaso del Perú. Esta cuarta participación, que tiene una gran historia para el equipo más querido de Quito, ya que logró su primera intervención  en la última Copa Merconorte 2001, con la histórica victoria en Aguas Calientes ante el poderoso Necaxa, de Agustín Delgado, 3-1, anotaciones de Néstor Sanata (12 y 14 minutos) y Raúl Duarte (28 min). Después Aucas jugó la sudamericana (evento que suplantó a la Merconorte) en el 2002 y 2004, primera fase ante equipos ecuatorianos como Barcelona y LDUQ.

La actitud del jugador es parte fundamental de lo que puede venir a favor o en contra de lo que se proyecta en la competencia profesional. Actitudes como la de Alex Bolaños, que se hace expulsar en forma infantil, no pueden darse más, porque ellos (los jugadores) están conspirando  contra los intereses de una institución que trabaja con pasión y sueña con algo mejor en este año.

Tercera conclusión. Aucas tiene la suerte de cobrar puntualmente. Los jugadores deben valorar la estabilidad económica que hoy tienen. Esa gran verdad del fútbol deben justificarla en la cancha, con entrega, sacrificio, sin eludir la responsabilidad en el campo, sin esconderse en los momentos áridos de partidos fragorosos y de alto nivel.

La lealtad debe ser el pilar básico para pretender mejores días, junto al deseo inclaudicable de consolidar la institucionalización de un equipo que tiene una idolatría a veces inexplicable, pero real a la hora de los grandes consensos.

LA COPA SUDAMERICANA EL MEJOR PRETEXTO. Entonces, si el panorama de aquí en adelante es alentador con gente que sabe de fútbol, que ha contribuido a mejorar un entorno con representaciones a alto nivel que servirán para prestigiar aún más a una divisa que siempre será gloriosa por la lucha inclaudicable de sus dirigentes, cuerpo técnico y futbolistas, la idea de pensar en mejores días para el equipo más querido de Quito, es un sueño que se puede convertir en realidad.

La marcha de un equipo que necesita institucionalizar sus propósitos y trabajar para soñar con una campaña llena de éxitos y sacrificios, debe tener humildad, honestidad, disciplina y entrega total .

La Copa Sudamericana que se jugará desde el próximo jueves 11 de agosto en el “Gonzalo Pozo Ripalda”, puede convertirse en el mejor pretexto para una levantada final. ¡Que así sea!

 Por: Gonzalo Melo Ruíz