Finalmente, sucederá: el Derby della Madonnina en las semifinales de la UEFA Champions League. En el Giuseppe Meazza, Inter consumó su clasificación con un empate 3-3 con Benfica, para firmar un resultado global 5-3, y deberá medirse con su histórico rival, Milan, por el pase a la final.
El juego comenzó bajo un manto de paridad, la que duró hasta los 13 minutos. Es que el Nerazzurro ingenió un buen contragolpe para convertir, el que contó con una asistencia en corto del argentino Lautaro Martínez y un posterior amague de Nicolò Barella dentro del área, quien, volcado a la derecha, se perfiló para la pierna zurda y sacó un remate letal al ángulo izquierdo.
A partir de la ventaja, y de un marcador general más abultado a su favor, los de Simone Inzaghi se afianzaron en el juego y elaboraron aproximaciones para aspirar a un nuevo gol, con remates desviados de Edin Dzeko y Henrikh Mkhitaryan. En la visita, Grimaldo probó al arco, aunque los italianos alcanzaron a festejar otra vez, mediante el Toro, pero su anotación fue anulada por una infracción previa.
Pasada la media hora, los Encarnados encontraron su momento en el encuentro y lo aprovecharon para ponerse en partido. A los 38 minutos, Fredrik Aursnes recibió un centro por la derecha de Rafa Silva y, con espacio, empató las cosas con un firme cabezazo.
Hacia el entretiempo, los lusos intentaron sacarle jugo al estímulo y volvieron a asomarse mediante Nicolás Otamendi. Sin embargo, todo fue al descanso, en el que la Biscione renovó sus energías y salió con una postura distinta a la segunda parte, para empezar a liquidar la serie.
Bajo la idea de golpear de contraataque, los locales le cedieron el balón al equipo de Roger Schmidt. Mediante este plan, y salvo unos acercamientos del rival, lograron generar situaciones hasta conseguir el segundo gol: Federico Dimarco tocó por la banda izquierda para Mkhitaryan, buscó la devolución dentro del área y lanzó para Martínez, quien solo tuvo que tocar hacia la red.
Sólido en su estrategia y con una eficacia a la orden del día, los Nerazzurri sentenciaron la llave con el tinte argentino. Esto porque Joaquín Correa, quien había ingresado unos minutos antes, anotó con un exquisito tiro colocado a la derecha, desde la izquierda del área, a los 78'.
En el tramo final, Inter se excedió en su repliegue y sufrió los goles de Antonio Silva, de cabeza, y Petar Musa, para la igualdad final. De todos modos, abrochó su boleto a las semis y luchará por el pase al partido por el título con su oponente de toda la vida, entre las semanas del 9 de mayo y del 16. Su inminente compromiso será por la Serie A, contra Empoli, el domingo. STATSPERFORM