Benfica tuvo una buena presentación dentro del complicado Grupo H de la Champions. El conjunto portugués venció por 2-0 a Maccabi Haifa como local y sumó tres puntos claves, teniendo en cuenta que la zona la completan los poderosos PSG y Juventus.
Fue de menor a mayor el Benfica en el Estádio da Luz de Lisboa. Al equipo de Roger Schmidt le costó generar juego en la primera parte, y pese a algunos destellos del argentino Enzo Fernández, no lograron complicar a la defensa rival.
Para colmo, Benfica tuvo un momento de angustia en esos primeros 45 minutos cuando el otro jugador albiceleste, el experimentado defensor Nicolás Otamendi, pisó mal tras un rechace de cabeza y preocupó a todos por los claros gestos de dolor en su rodilla. El futbolista de la Selección argentina, sin embargo, pudo seguir en cancha.
El conjunto portugués finalmente destrabó el partido en el complemento. Ya con mejores ideas, el Glorioso encontró el primer gol tras una linda jugada colectiva que culminó con la definición de Rafa Silva, tras centro desde la izquierda de Alejandro Grimaldo.
Justamente, el lateral español se encargó de extender la ventaja minutos más tarde, y con una obra de arte: el ex futbolista de Barcelona B recibió la pelota en tres cuartos de cancha y sacó un latigazo de zurda que se clavó en el ángulo del arco defendido por el estadounidense Josh Cohen.
Así, Benfica consiguió sus primeros puntos dentro del Grupo H y ahora se viene lo difícil: encuentros consecutivos ante Juventus y PSG. El primero de ellos llegará la próxima semana, cuando visiten a la Vecchia Signora en Turín. Por su parte, Maccabi recibirá al París de las estrellas. STATSPERFORM