Los problemas de eficacia y resultados quedaron a un lado por completo. Inter festejó en su visita a Lisboa y se llevó la victoria. Venció por 2-0 a Benfica en el partido de ida por los cuartos de final de la UEFA Champions League en el estadio Da Luz y sacó una gran ventaja para la revancha.
Pese a que el trámite se presentó complejo en Lisboa, el equipo de Simone Inzaghi logró dejar atrás la mala racha como también sus problemas de efectividad. Solo con un golpe certero le alcanzó para sacar ventaja de cara al partido en el Giuseppe Meazza de la próxima semana.
El local había comenzado mejor, con una chance concreta después de un rechazo corto de cabeza de Federico Dimarco y el balón le quedó a Rafa Silva, pero André Onana respondió con una gran salvada con el pecho. Luego, Joao Mario intentó con una volea cruzada y se fue cerca.
Sin embargo, Francesco Acerbi se animó con un tremendo disparo desde más de 35 metros que salió apenas arriba del travesaño para el Nerazzurri. Luego, probó Alejandro Grimaldo con un tiro desde afuera que se fue a metros del palo izquierdo de Onana, pero no llevó peligro.
Ya para la segunda mitad, cuando todo parecía calmo, un centro preciso de Alessandro Bastoni desde la izquierda derivó en un cabezazo cruzado de Nicolo Barella para romper la paridad. En la respuesta, Rafa Silva casi lo empata para las Águilas, pero salvó Denzel Dumfries en la línea.
Después, todo fue para los de Inzaghi. Ya sin Lautaro Martínez ni Edin Dzeko, pero con Romelu Lukaku y Joaquín Correa, todo se encaminó a su favor. Primero avisó con un tiro de Henrikh Mkhitaryan, tras pase de Correa, que contuvo Odisseas Vlachodimos en dos tiempos.
También se animó el mismo Barella con un disparo desde afuera que se fue cerca del palo derecho, aunque la más clara quedó en la cabeza de Dumfries, luego de un centro de Bastoni que atajó primero el arquero y en el rebote salvó Morato en la línea para evitar el segundo.
La historia continuó, y unos minutos después, tras un centro de Dumfries por derecha, el balón dio en la mano izquierda de Joao Mario. El árbitro, después del llamado del VAR, observó las imágenes y sancionó el penal: Lukaku se encargó de cambiarlo por gol y ampliar la ventaja.
Con un disparo cruzado de zurda al ras del suelo, Romelu estiró la diferencia y sentenció el triunfo en el primer chico para dejar a Benfica sin posibilidades. Si bien intentó sobre el final, los de Roger Schmidt lo tuvieron con Goncalo Ramos, pero tapó Onana sin dar rebotes.
Inter se quedó con todo el premio como visitante y pese a su irregular presente en la Serie A, dio un gran paso en la Champions League para meter un pie en las semifinales. El próximo miércoles disputarán el partido de vuelta en Milán, en el que definirán al clasificado. STATSPERFORM