Pesa 10,25 kilos y mide 98 centímetros, de los cuales 63 cm son de plata 925 y 35 cm de madera de cedro. Sobre ella, hay 56 chapitas para nombrar a los 25 campeones de la Copa Libertadores. Así es el trofeo original que causa desvelo en Sudamérica y hoy, al menos hasta el sorteo del 22 de diciembre de la próxima Copa, está en poder de River, que ese día recibirá una réplica por el título logrado recientemente, pero mientras exhibe la joya en su museo.
Algunas de esas chapitas están despintadas, pese a que sólo tienen seis años. En 2009, se confeccionaron especialmente para que todas fueran iguales y se dispusieron en forma horizontal. Desde la primera, la de Peñarol de 1960, hasta la última, la de River de 2015, son 56, ordenadas en filas de nueve. En este momento, quedan 16 lugares disponibles, por lo cual recién en 2031 estará llena de insignias.
En el trofeo inicial de 1960, cada equipo ponía su chapa y la hacía de oro, plata o bronce. Al principio, eran siete columnas con lugar para tres campeones, que se disponían en forma vertical. Hasta 1980, cuando se consagró Nacional, hubo lugar. Luego, debieron agrandar el pedestal, con una fila nueva y se reubicaron las chapas que ya estaban. En 1987, volvió a completarse y comenzaron a agregarse las insignias en el borde del pedestal y en forma horizontal. Recién en 2004 se renovó, pero ese año Once Caldas rompió el trofeo en los festejos tras vencer a Boca. Tuvieron que enviarlo a reparar. En 2009, se realizó la última modificación. Se quitaron las chapas y se hicieron todas del mismo tamaño con el nombre y el escudo de cada club. Cuando un nuevo equipo se consagra, se coloca la chapa antes de entregarse el trofeo.
Algunos detalles son para destacar. Por ejemplo, en las chapitas de Estudiantes campeón de las copas '68, '69 y '70 dice clube como si fuera brasileño. En la que conquistó en 2009, se lee "Estudientes". Debajo de la chapa que se colocó en 2014 cuando se consagró San Lorenzo se ve un agujero en el pedestal. Se colocó mal uno de los clavos y al sacarlo arruinó la madera. La de River de 1996 y las de Boca de 2000 y 2001 son de las más deterioradas de todo el trofeo.
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PLACA DE LIGA DE QUITO, CAMPEÓN DEL 2008:
Tomado: canchallena.lanacion.com.ar
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